Hace algunas semanas en la Asociación de Hoteleros de Chile creían que el 20% de ocupación promedio que reportaban aumentaría conforme se acercaban Fiestas Patrias. Pero hoy, a menos de un mes de Fiestas Patrias, gran parte de las reservas siguen por debajo del 50%. Y pese a los esfuerzos de la industria por retomar la actividad, el alto nivel de endeudamiento sumado a la falta de apoyo por parte de las autoridades amenaza la sobrevivencia de los establecimientos. E incluso tiene a varios de ellos al borde de la quiebra.

Esta semana el principal gremio que agrupa a los hoteles de Chile realizó una encuesta entre los socios que componen el gremio respecto a la ocupación registrada previo al 18 de septiembre. Y los resultados no fueron para nada alentadores.

En la encuesta participaron 39 hoteles, pero 5 de ellos operan como residencias sanitarias, por lo que se consideró solo a los 34 establecimientos restantes como el universo total. De esta manera, el informe reveló que el 70% de los hoteles, es decir 24 firmas, reporta un 50% o menos de ocupación. De ellos, 13 concentran una ocupación de un 0 - 10%, y solo 7 pueden decir que las reservas superan el 30%.

Una cifra muy por debajo del 65% - 70% promedio de ocupación reportado en años “normales”.

Por otro lado, solo 10 establecimientos aseguraron que cuentan con más de un 50% de ocupación, es decir el otro 30% de la muestra. De estos, 6 encuestados (18%) registraron reservas de un 80% o más.

En el estudio respondió un grupo de hoteles ubicados a lo largo de todo el territorio nacional: entre ellos, 4 en la región de Antofagasta, 21 en la Metropolitana, uno en Concepción, y dos en Magallanes. Por lo que la diversidad de los encuestados revela un panorama nacional que, a ojos del gremio, difícilmente podría repuntar en los próximos días.

Pues, en la asociación saben que el paso de la RM a la fase de apertura Inicial implica menores restricciones a la movilidad, y por ende lo lógico sería esperar una incremento en la cantidad de reservas previo a Fiestas Patrias. Sin embargo, explican que existen otros factores que muchas veces no son tomados en cuenta por las autoridades y que, a pesar de las flexibilidades sanitarias existentes, dificultan aún más el panorama.

Falta de ayudas complica al sector

Uno de ellos, según explica el presidente del gremio, Alberto Pirola, se refiere a la falta de condiciones que agilicen el tránsito por las carreteras, y que afecta a la toma de decisión por parte de los turistas respecto de viajar de un lugar a otro.

“Hay carreteras que hoy no pueden seguir con el sistema de colas de más de 20 - 30 minutos en los peajes. Hay que automatizar la situación. Y tal como se ha mejorado el aeropuerto, creo que tenemos varias formas de cobro que ameritan una automatización para agilizar los viajes”, señala Pirola. Y agrega que “con un fin de semana de tres días, la gente evalúa mucho si quiere ganar un taco de ida y otro de vuelta. Se escucha cuando la gente hace cotizaciones en las reservas”.

Actualmente el sector cuenta con 230 mil trabajadores cesantes y/o acogidos al Seguro de Cesantía a través de la Ley de Protección al Empleo. Y desde el gremio imploran por ayuda. Según cuenta el presidente de los hoteleros, el ministro de Economía, Lucas Palacios, los ha escuchado y apoyado, pero las decisiones “no dependen sólo de él”, por lo que están intentando sostener reuniones con el Minsal y principalmente, con el ministro Enrique Paris.

“Hay que entrar a conversar, y esto es lo que le hemos pedido siempre a las autoridades: tener más mesas público-privadas de trabajo en conjunto. Nosotros tenemos mucho que aportar, como lo hemos hecho con los hoteles de tránsito, y hemos dado un ejemplo de cómo se puede trabajar con gente que estaba contagiada”, dice.

Y es que el escenario actual en el que operan los establecimientos parecen empeorar cada vez más ante la falta de movimiento al interior del sector. “El mercado nacional mueve la aguja, pero no da para cubrir los costos”, comenta. Y afirma que varios hoteles pertenecientes al gremio se encuentran al borde de la quiebra.

Hace aproximadamente tres meses la Asociación de Hoteleros de Chile consultó a sus socios cuál era su situación económica actual, y un 40% de ellos afirmó estar atrasado en cuanto al pago de imposiciones. Esto, mientras que un número importante simplemente no paga contribuciones.

“Lo último que evitas no pagar son impuestos, o sea cuando tú ya estás ahí, es porque la situación es complicada”, dice Pirola. En 30 días más los hoteleros se verán enfrentados a una nueva cuota, por lo que le piden a las autoridades que el cobro se suspenda.

“No están los medios, no hay caja y necesitamos que nos escuchen y entiendan. No es porque no queremos (pagar). Llevamos un año y medio sin operar y necesitamos ayuda. Si no hay una respuesta positiva por parte de la banca comercial, se va a poner complicada la situación”, sostiene.

Pero la falta de ayuda económica directa no es la única crítica que hacen desde la asociación. Además de las millonarias deudas que hoy mantiene un gran número de firmas, el hecho de que la autoridad mantenga las fronteras cerradas para los extranjeros, se ha transformado en una obstáculo que poco a poco está “matando” al sector, dice el presidente del gremio.

“A nosotros nos abren las fronteras y te aseguro que bajamos de los 230 mil (trabajadores desempleados), y no quedarían más de 70 mil cesantes o desvinculados”, sostiene. Y afirma que “esto no es un slogan, no somos políticos. Estamos vendiendo la realidad”.

Es en este contexto que Pirola propone escuchar “al extranjero que quiere venir a Chile por el turismo al aire libre y el avance de las vacunas”, de manera de incentivar el turismo interno. “No nos ayuden directamente a nosotros, pero ayuden al pasajero chileno. Dénles una subvención para que recorran Chile y viaje, y así poder mover más el mercado. Busquemos soluciones o esto va a producir quiebras”, advierte.

“El país requiere, no solo el turismo, del movimiento del turista corporativo. Si hablamos de economía, es necesario”, comenta. Y proyecta ocupaciones promedio de no más de un 40% durante los meses de verano, ya que, según dice, “el mercado no da para más”.