Las exportaciones de China anotaron en diciembre su mayor caída en dos años y las importaciones también se contrajeron, lo que sugiere una debilidad adicional para la segunda economía más grande del mundo en el 2019 y un deterioro en la demanda global.

Sumándose a las preocupaciones de los funcionarios, otros datos reportados el lunes mostraron que China registró en el 2018 su mayor superávit comercial con Estados Unidos desde que hay registros, lo que podría hacer que el presidente Donald Trump aumente la presión sobre Pekín en su disputa comercial.

Un enfriamiento de la demanda en China ya se está haciendo sentir en todo el mundo, con una desaceleración en las ventas de productos que van desde iPhones a automóviles, lo que ha generado advertencias de ganancias de firmas como Apple y Jaguar Land Rover.

Las sombrías lecturas comerciales de diciembre sugieren que la economía china podría haber perdido más impulso a fines de año que lo que se pensaba anteriormente, a pesar de una serie de medidas que impulsaron el crecimiento en los últimos meses.

Algunos analistas ya habían especulado la posibilidad de que Pekín tenga que acelerar e intensificar su expansión monetaria y medidas de estímulo este año después de que la actividad fabril se contrajo en diciembre.

Las exportaciones cayeron un 4,4% en diciembre respecto al año anterior, y la demanda en la mayoría de los principales mercados se debilitó. Las importaciones también experimentaron un fuerte retroceso, bajando un 7,6% en su mayor caída desde julio del 2016.

"El crecimiento de las exportaciones disminuyó más que lo previsto a medida que el crecimiento global se suavizó y el lastre por los aranceles estadounidenses se intensificó. El crecimiento de las importaciones también se redujo ante el enfriamiento de la demanda interna. Esperamos que ambos se mantengan débiles en los próximos trimestres", dijo Capital Economics en una nota.

"Mientras tanto, dado que es poco probable que la expansión monetaria ponga un piso debajo de la actividad económica doméstica hasta la segunda mitad de este año, es probable que el crecimiento de las importaciones se mantenga moderado", agregó.

El superávit de China con Estados Unidos aumentó un 17,2% a US$ 323.320 millones el año pasado, su nivel más alto desde que comenzaron los registros en el 2006, según cálculos de Reuters basados en datos de aduanas.