La semana pasada se cumplió un nuevo aniversario del estallido social y a cinco años de ese 18 de octubre, el economista y exconsejero del Banco Central, Pablo García, conversó con radio Duna sobre los efectos del estallido, y la posterior pandemia de Covid 19, en la economía chilena.

“Lo que pasó en la combinación del estallido más la pandemia es parecido a la crisis de los 80. Lo que pasa es que el shock mismo se pudo enfrentar mejor”, sostuvo García.


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Para el académico, lo que más afectó a la economía fueron los retiros y las entregas de los Ingresos Familiares de Emergencia (IFE), que en su opinión, fueron excesivos. “Acomodar la crisis de la pandemia yo creo que fue establemente eficaz”, expresó.

A lo anterior agregó que “claramente el problema del estallido social no era la Constitución, porque se hicieron dos intentos de cambiarla y fue rechazado. También está claro que el IFE universal se cortó, no hubo necesidad de continuarlo, lo cual posiblemente muestra que tampoco era necesario”.

En esa línea, el economista añadió que “se hicieron cosas que fueron muy extremas y ahora nos damos cuenta que fueron pasadas para la punta”.

“La percepción de riesgo de esta economía claramente es mucho más alta. Es verdad que la incertidumbre ha bajado, que los niveles de incertidumbre son parecidos a los que había previo al estallido, pero pasaron cuestiones que no puedes ponerlas de vuelta a la caja”, advirtió García al referirse acerca de las discusiones constitucionales y los retiros de fondos de pensiones.

Pablo García por las ayudas económicas en pandemia: “ahora nos damos cuenta que fueron pasadas para la punta”.

Así, García afirmó que “se pasó una vara respecto a lo que se puede lograr con la realidad, que da un poquito de vértigo”. Asimismo, señaló que “aquí el tema de los retiros, no solamente fue el retiro en sí, sino que tuvo un regalo fiscal gigante, que fuera libre de impuesto. Entonces eso le agregó más crema chantilly al café helado”,

El académico indicó que, según las encuestas, las personas reconocían que “esto era dañino”, pero que de igual manera apoyaban las medidas.

“Entonces cuando el Poder Legislativo y el Ejecutivo se desarman y empiezan más bien a responder a esta cosa más atomizada, populista, es una falla fundamental de cómo funcionan”, comentó.