Panamá y China instalaron hoy en la capital panameña la primera ronda de negociaciones de un tratado de libre comercio (TLC) que pretenden sea "moderno" y posicione al país centroamericano como puerta de entrada de los productos e inversiones chinos en la región.
"Los negociadores abarcarán temas específicos. Se pretende de ambos lados negociar un tratado de libre comercio, moderno, amplio y abarcador, de alto nivel", dijo a periodistas el embajador de China en Panamá, Wei Qiang.
El diplomático sostuvo que China defiende negociaciones comerciales en las que las palabras claves son "ganar-ganar y beneficio recíproco", con énfasis en la contribución para la consolidación de las relaciones bilaterales e internacionales.
El ministro panameño de Comercio e Industrias, Augusto Arosemena, dijo por su parte que Panamá tiene entre sus metas posicionarse como puerta de entrada de los productos e inversiones de China para toda la región mediante el TLC.
"Un TLC no es todo, pero si no hacemos los cambios para facilitar las exportaciones no vamos poder aprovecharlo, por eso debemos tener como visión y reto romper esas barreras y nudos, y que nuestras autoridades faciliten llevar los productos no solo a China, sino a otros mercados", declaró el ministro.
Esta primera ronda de negociación se extenderá hasta el viernes para homologar, acordar terminología, definiciones y conceptos del TLC.
Hay nueve mesas de trabajo para abordar asuntos relacionados con marco legal, normas de cooperación, legislación sobre medidas de sanitarias y fitosanitarias, normativa de propiedad intelectual, análisis sobre barreras al comercio y medidas de salvaguarda.
Arosemena destacó que en la misión negociadora panameña se incluyó a representantes del sector privado a fin de generar una interacción eficaz con ambas partes.
"Todos los países que entran a negociar con socios comerciales grandes, posiblemente deben hacer cambios importantes, es por eso que (en el caso de estas negociaciones) se analiza con el sector privado y más de 50 gremios ver en qué podemos mejorar y cambiar para que se den las exportaciones", manifestó Arosemena.
La próxima ronda de negociaciones está prevista para agosto próximo en Beijing, en la que se determinarán las próximas fechas del abordaje del TLC.
Los Gobiernos de ambos países lanzaron oficialmente las negociaciones para el TLC el pasado 12 de junio en una ceremonia en la capital china, coincidiendo con el primer aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas.
El año pasado, Panamá importó desde China bienes y servicios por valor de US$1.344 millones y exportó productos por valor de US$42,6 millones, entre desechos de cobre y aluminio, crustáceos, madera y café.
El país asiático es el primer proveedor de la Zona Libre de Colón, la zona franca más grande del hemisferio, ubicada en el Caribe panameño, y el segundo usuario más importante del Canal de Panamá, por el que pasa cerca del 6% del comercio mundial, después de EEUU.