El Banco Central informó que, en comparación con el cierre de 2022, durante la primera mitad de este año se observó una disminución de sus activos y un aumento de sus pasivos, lo que resultó en una caída de su patrimonio.
Entre el 31 de diciembre de 2022 y el 30 de junio de 2023, el tamaño de los activos se redujo en $2.558 mil millones, pasando de 26,2% a 24,2% del PIB, mientras que los pasivos aumentaron $1.027 mil millones, cerrando el periodo en 25,9% del PIB. Como resultado, el Banco Central pasó, en 6 meses, de tener un patrimonio negativo de $1.024 mil millones (equivalente a -0,4% del PIB) a fines del 2022 a un patrimonio negativo de $4.609 mil millones (equivalente a -1,7% del PIB) al cierre de junio.
De acuerdo a la autoridad monetaria, el resultado se explicó, principalmente, por el mayor costo asociado a la emisión de Pagarés Descontables del Banco Central (PDBC) y a la variación del tipo de cambio en ese periodo (al 30 de junio, el peso se había apreciado 6,6% respecto del cierre de 2022).
La disminución de los activos durante el periodo fue cercana a 1,9% del PIB y se explicó, principalmente, por el menor valor de las reservas internacionales medidas en pesos, por $1.950 mil millones.
Al 30 de junio de 2023, las reservas internacionales totalizaron US$343,2 millones más que al cierre de 2022, llegando a US$39.497,4 millones.
En cuanto a la exposición del Portafolio de Inversiones por tipo de riesgo y país, al cierre del reporte presentado este miércoles, existían grados de diversificación “apropiados para los distintos tipos de riesgos en que se invierten las reservas internacionales”.
Al cierre de junio 2023, las inversiones en riesgo soberano representaban 95,7% del Portafolio de Inversiones y se encontraban, principalmente, en Estados Unidos (73,3%), China (7,5%), Reino Unido (4,4%) y Francia (3,5%).
Al cierre del período, las inversiones en riesgo supranacional representaban un 2,3%, el riesgo de agencias 0,5% y el riesgo bancario un 0,5%.
La composición de monedas del Portafolio de Inversiones era: 77% en dólares de Estados Unidos, 7,8% en renminbi de China, 5,1% en euros, 4,1% en libra esterlina, 2,9% en won de la República de Corea del Sur y un 3,0% en dólares de Australia.