Paula Valverde, la defensora de los locatarios de los centros comerciales

No solía ser un sector muy bullicioso, hasta este año. Los locatarios de centros comerciales se vieron enfrentados a una situación inédita: los malls cerrados y los clientes comprando en masa por internet, reduciendo al mínimo sus visitas a las tiendas físicas.

En ese contexto, que incluyó duras negociaciones con los operadores de centros comerciales para flexibilizar las condiciones de arriendo y los cobros, el rostro de la industria ha sido la socia y gerenta general de la cadena de tiendas de vestuario infantil Limonada, Paula Valverde Norambuena.

Su historia de negocios parte muy joven. Hace quince años, junto con su hermana Valentina, tomaron el control de Valverde Norambuena, empresa familiar que sus padres fundaran en 1989 y que siempre estuvo orientada al diseño y fabricación de ropa “divertida” y a la moda para infantes. En los años siguientes, y al mando de Valverde, desarrollaron un agresivo plan que los llevó a operar casi 90 tiendas, desde Arica hasta Punta Arenas, y estar presentes en prácticamente todos los grandes malls del país.

Paula, ingeniera comercial de la Universidad Diego Portales y seleccionada Emprendedora Endeavor en diciembre del 2011, tomó las riendas de la empresa familiar a los 22 años. Cuenta que desde pequeña pasaba largo rato en los talleres de confección de ropa, pero no heredó de su madre la pasión por el diseño -lo que hizo su hermana y actual brazo derecho, Valentina-, sino que la gestión. Por eso su padre, que quería tomarse un sabático, le ofreció el cargo, que aceptó feliz pese a su juventud.

Una de sus primeras misiones fue embarcarse a China, para analizar la industria de confección local y desarrollar alianzas. Eso sería clave para acelerar el proceso de producción de Limonada y su expansión: en vez de depender de las grandes multitiendas, montaría su propia red de locales.

A cargo de la Asociación de Marcas del Retail, Paula Valverde ha mostrado un estilo directo y firme, levantando la voz de los locatarios frente a los operadores de centros comerciales y al gobierno. “Nos están cobrando los gastos comunes y no tenemos claridad de los motivos si los centros comerciales están cerrados. Queremos tener claridad sobre los cobros y que sea igual que un edificio”, dijo a fines de abril pasado.

“Presidir este gremio ha sido un desafío, estoy convencida del tremendo valor que aportan nuestros socios al país. Muchos de ellos representan empresas que han traspasado generaciones, que fueron fundadas por sus padres o abuelos y partieron con nada. Han dedicado sus vidas a construir valor y empleos”, sostiene, por lo que apuesta a desarrollar una industria “justa y unida”.

Agrega que “asumo que este liderazgo involucra exposición, pero por esencia tengo un espíritu luchador y creo que en Chile tenemos muchas cosas que cambiar para ser un país de oportunidades, pero para todos”. P