El número de personas que pidió beneficios estatales por desempleo en Estados Unidos se redujo más de lo previsto la semana pasada, pero siguió siendo extraordinariamente alto en medio de señales de que la recuperación del mercado laboral estaría perdiendo fuerza.
Los pedidos iniciales de ayuda por desocupación totalizaron una cifra desestacionalizada de 881.000 en la semana al 29 de agosto, desde los 1,011 millones de la semana previa, dijo el jueves el Departamento del Trabajo. Economistas consultados por Reuters esperaban 950.000.