Los consumidores demandan productos personalizados y Pepsi parece haber interpretado lo que este significa en el mercado de los bebestibles. Ayer informó que comprar por US$3.200 millones, la firma israelita de refrescos hecho en casa Soda Stream, que ganó notoriedad en 2014, tras la emisión de un aviso publicitario protagonizado por Scarlett Johansson en el Super Bowl.

"PepsiCo y SodaStream hacen un inspirador Match", dijo el presidente y CEO de PepsiCo, Indra Nooyi. "Daniel Birnbaum (CEO de SodaStream) y su equipo de liderazgo han creado una empresa extraordinaria que ofrece a los consumidores la capacidad de producir bebidas de gran sabor y reducir la cantidad de desechos generados".

Aunque el acuerdo no generó mayores sobresaltos en el mercado, Kenneth Shea, analista senior de industrias en Bloomberg Intelligence, indicó que la adquisición "es un paso evolutivo en la iniciativa de la compañía para diversificar su cartera de bebidas azucaradas. También permite a PepsiCo interactuar más directamente con los consumidores a través de la venta de cápsulas de jarabe con sabor que SodaStream utiliza con sus máquinas".