Este jueves, y a pesar de la intervención que realizó el Banco Central de la República Argentina (BCRA), la moneda trasandina tocó un nuevo mínimo histórico, además de liderar el listado de las divisas que más cayeron en el mundo.

El martes, el BCRA inyectó cerca de US$500 millones para contener la depreciación de la moneda trasandina. En efecto, el tipo de cambio recuperó terreno e incluso lideró las ganancias en la canasta de monedas emergentes (+1,2%).

Sin embargo, el escenario dio un vuelco este jueves. Al cierre de las operaciones, la moneda se desplomó de 6,17% y alcanzó el mínimo histórico de 27,98 unidades por dólar.

Ante esto, un operador de la banca internacional comenta que el Central, en lugar de darle previsibilidad y de calmar la volatilidad del mercado, "está incorporando mucho ruido con sus intervenciones erráticas, la cuales generan estos tremendos movimientos en el AR. No queda clara la real intención cambiara, y es algo que el mercado percibe", agregó.

Respecto al rebote que experimentó la moneda trasandina el martes -tras la inyección realizada por el ente rector- el operador explica que el salto corresponde a pequeñas recuperaciones, "pero cada intervención del BCRA, el mercado la percibe ya que es un sell oportunity para el ARS".

En lo que va del año, la moneda argentina acumula una depreciación de 32,23% y alcanza el segundo lugar dentro de las divisas que más se han depreciado frente al dólar en el mundo.

El desplome de la paridad ocurre en clima de fortaleza para el dólar, luego de la reunión de la Reserva Federal de EEUU, en donde el consejo determinó subir los tipos de interés al rango 1,75% y 2%. Sumado a ello, el comunicado de la entidad dio señales de concretar dos incrementos más en 2018.

En este contexto, el mercado de acciones trasandino se sumó a las pérdidas del tipo de cambio. El Merval -principal indicador de la plaza bursátil- retrocedió 0,21%.

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