El petróleo cayó este lunes debido a que la OPEP volvió a rebajar su previsión de crecimiento de la demanda mundial de crudo para 2024 y 2025, mientras que las importaciones de China bajaron por quinto mes consecutivo.
Los planes de estímulo de China tampoco lograron inspirar la confianza de los inversionistas, mientras que los mercados siguieron atentos a posibles ataques israelíes contra la infraestructura petrolera iraní.
Los futuros del crudo Brent perdieron 2%, a US$77,46 por barril, mientras que los futuros del crudo estadounidense West Texas Intermediate cedieron 2,29%, a US$73,83 por barril.
La OPEP recortó este lunes su previsión de crecimiento de la demanda mundial de petróleo en 2024 y también rebajó su proyección para el próximo año, lo que supone la tercera revisión a la baja consecutiva del grupo.
Dudas sobre China
China, el mayor importador de crudo del mundo, representó la mayor parte de la rebaja para 2024, ya que la OPEP recortó su previsión de crecimiento para el país a 580.000 barriles por día desde 650.000.
Las importaciones chinas de crudo en los nueve primeros meses del año cayeron casi un 3% respecto al año pasado, hasta 10,99 millones de barriles por día, según los datos.
Las presiones deflacionarias de China empeoraron en septiembre, según los datos oficiales publicados el sábado. Una conferencia de prensa realizada el mismo día dejó a los inversio0nistas con dudas sobre la magnitud global de un paquete de estímulo para reanimar la fortuna de la segunda economía mundial.
“Las medidas de estímulo monetario de China no han logrado estimular y la promesa del Ministerio de Finanzas del fin de semana de pedir más préstamos tuvo muchos clichés y frases pero pocos detalles tranquilizadores y convincentes”, dijo Tamas Varga de la corredora de petróleo PVM.
El índice de precios al consumidor de China no cumplió las expectativas el mes pasado, mientras que el índice de precios a la producción cayó al ritmo más rápido en seis meses, un 2,8% interanual, según la Oficina Nacional de Estadísticas.
Las noticias negativas procedentes de China pesaron más que la preocupación de los mercados por la posibilidad persistente de que una respuesta israelí al ataque con misiles de Irán del 1 de octubre pudiera perturbar la producción de petróleo.
Estados Unidos anunció el domingo que enviará tropas a Israel junto con un avanzado sistema antimisiles, en un despliegue poco habitual destinado a reforzar las defensas aéreas del país.