La economía chilena experimentó una ligera recuperación. De acuerdo al Banco Central, el Producto Interno Bruto (PIB) mostró una expansión de 1,9% en el segundo trimestre del año, cifra superior al 1,6% del periodo enero-marzo y en línea con las expectativas de los analistas.
Con este resultado, la economía chilena cerró el primer semestre con una expansión de 1,75%.
Con un día hábil menos que en el segundo trimestre del año 2018, el efecto calendario fue de -0,2 puntos porcentuales. El emisor detalló que desde la perspectiva del origen, las actividades de servicios impulsaron a la economía, destacando los servicios personales y, en menor medida, los empresariales e inmobiliarios. En contraste, la industria manufacturera y la actividad agropecuario-silvícola cayeron en el período.
La actividad económica exhibió un incremento de 0,8% respecto del trimestre anterior, de acuerdo a cifras ajustadas estacionalmente. En este resultado, destacó la recuperación de la minería y, en menor medida, la contribución de los servicios empresariales, el comercio y las actividades inmobiliarias. En contraste, las mayores incidencias a la baja se observaron en las actividades de construcción y agropecuario-silvícola.
Una de las cifras positivas del periodo abril-junio, fue el de la formación bruta de capital fijo. En efecto, la inversión mostró un salto de 4,8%, muy superior al 3,2% del primer trimestre.
El contexto
Las cifras reveladas por el Central se conocen en medio de las preocupaciones en torno a la desaceleración de la economía mundial y la guerra comercial. Esto ha tenido impacto en la actividad local y ha obligado a sucesivos recortes en las perspectivas de crecimiento de analistas, bancos, el propio emisor y el gobierno.
En ese contexto, hay que recordar que la meta de la autoridad es cerrar el ejercicio con una expansión en torno a 3%, una proyección difícil de alcanzar a la luz del desempeño que ha tenido la actividad en la primera parte del año. Para conseguirlo, el PIB debiera acelerar en esta parte del año y promediar un crecimiento de 4,2%.
La minería
La actividad minera creció "marginalmente" en el segundo trimestre, un 0,2%, en línea con la recuperación de la producción cuprífera. El emisor dijo que en los otros subsectores se observaron resultados mixtos; la producción de hierro y la extracción de oro y plata se redujeron, mientras que la extracción de minerales no metálicos aumentó.
El desempeño de la minería del cobre presentó resultados dispares entre los distintos yacimientos del país. Por una parte, en algunas faenas se registraron mayores leyes del mineral, que favorecieron la extracción de minerales de cobre y sus concentrados, mientras que la producción de cobre refinado cayó debido a la paralización de fundiciones en el sector.
En tanto, la menor producción de mineral de hierro se explicó por la imposibilidad de realizar envíos al exterior, debido al cierre de su principal puerto de embarque.
Finalmente, la expansión en la extracción de minerales no metálicos se debió a un aumento generalizado en sus productos, destacando caliche, litio y minerales utilizados para la construcción.