El presidente Sebastián Piñera dijo hoy que comparte "en gran medida" los planes económicos del candidato presidencial brasileño Jair Bolsonaro, pues apuntan en la dirección adecuada para el desarrollo del país, acompañados de un compromiso fuerte de lucha contra la corrupción.

"La verdad es que conocemos poco a Bolsonaro", matizó Piñera en el foro económico del diario español El País, donde intervino hoy en una visita de trabajo a Madrid para reunirse con el jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez, y con Felipe VI.

El ultraderechista Bolsonaro ganó los comicios del domingo pasado con el 46,03 % de los votos válidos, aunque tendrá que disputar la Presidencia de la República en una segunda vuelta electoral con Fernando Haddad (29,28 %), del Partido de los Trabajadores.

Piñera cree que los brasileños votaron más en contra de los demás políticos que a favor de Bolsonaro, que se presentó con un discurso "muy fuerte contra la violencia, la corrupción y el 'establishment'", en un país que ha conocido "todos los escándalos posibles" de corrupción y lleva años de recesión.

"Hay una gran incertidumbre, pero lo que he visto en materia de desarrollo de Brasil, creo que apunta en la dirección correcta", apuntó Piñera.

No obstante, el presidente chileno también recordó que ha escuchado a Bolsonaro su "cosa homofóbica y cierto lenguaje muy agresivo con las mujeres".

Aseguró que está de acuerdo "en gran medida" con las señales que da Bolsonaro en cuanto a abrir la economía brasileña, reducir el déficit fiscal, reformar las pensiones y aminorar el tamaño del sector público con "muchas privatizaciones".

"Creo que es lo que un país como Brasil, que es un gigante, necesita", apostilló.

Piñera subrayó que, al mismo tiempo, se necesita una lucha frontal contra la corrupción.

"La corrupción y el populismo han sido dos formidables enemigos, que han provocado la crisis que Brasil ya arrastra desde hace mucho tiempo", enfatizó.

Insistió en que la mejor forma de combatir la corrupción es la transparencia, y valoró que Bolsonaro mencionara "el modelo chileno" en este sentido, según explicó.

El Estado brasileño, "un ente muy gigante y opaco", quiere evolucionar hacia algo "más ágil y más transparente", comentó.

En los dos países más grandes de Iberoamérica, Bolsonaro es una "sorpresa" en Brasil, según Piñera, y la otra es el presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, que "ha cambiado mucho".

"Alguien decía que, en América Latina, el poder es como el violín: se toma con la izquierda, pero se toca con la derecha", remató.