Un nuevo avance se produjo esta tarde en el proyecto que prohíbe la instalación y funcionamiento de centrales termoeléctricas a carbón al 2025. Por amplia mayoría se aprobó en general en la Sala de la Cámara la iniciativa (123 votos).
El proyecto ahora vuelve a la Comisión de Medio Ambiente para el análisis de indicaciones que se presentaron en la Sala esta jornada.
Este se transforma en un nuevo revés para el gobierno, que ha manifestado su rechazo al proyecto, pues no están las condiciones para un cierre anticipado al año 2025.
En la Comisión de Medio Ambiente donde se discutió la iniciativa, el ministro de Energía, Juan Carlos Jobet, sostuvo que, si bien, el gobierno comparte la necesidad de cerrar las centrales a carbón ello no se puede hacer mediante un proyecto de ley y de manera inmediata.
En esa misma línea, desde la Comisión Nacional de Energía (CNE) su secretario ejecutivo, José Venegas, dijo que “los cálculos que habitualmente se hacen son muy simplistas y desconocen la complejidad de la operación del Sistema Eléctrico. Se suman los MW de capacidad instalada y eso no es lo correcto”.
No es llegar y comparar MW instalados ni reemplazar generación segura en gran proporción que representa hoy el carbón por hipotéticos proyectos o desarrollos de inversión que supuestamente ocurrirán. En la CNE hemos hecho esas simulaciones y consideramos imprudentes proceder a una descarbonización rápida sin disponer de infinidad de medidas que serían necesarias", complementó.
Por último, el director ejecutivo de Ecom Energía, Sebastián Novoa también manifestó su rechazo al proyecto. En concreto, sostuvo que quienes se verían más beneficiados con estas medida serían las mismas empresas eléctricas y que los mayores perjudicados con esta medida serían los consumidores de energía. “Todos los contratos eléctricos tienen cláusulas de revisión de precios ante cambios regulatorios, regulados y libres, y este ejercicio cae claramente es esta categoría”, agregó.