La presidenta de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), Rosario Navarro, valoró y destacó las alianzas público privadas que se han llevado a cabo desde el gobierno de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, con la privatización de los servicios sanitarios, lo que ha permitido avanzar de forma rápida y eficiente en la modernización de los servicios.
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En el seminario “Alianza Público – Privada en gestión del agua” del Consejo de Políticas de Infraestructura, la presidenta del gremio apuntó a que “en 1999 sólo el 16% de la población contaba con tratamiento de aguas servidas, lo que significaba que los ríos corrían con un desagradable olor, y las hortalizas se regaban con aguas contaminadas. Enfermedades como el cólera proliferaban en todos los estratos sociales”.
Así, recordó que desde los 2000 en adelante, en el gobierno de Frei Ruiz-Tagle, con Ricardo Lagos como ministro de Obras Públicas, “se dio un fuerte impulso a la modernización de la infraestructura de toda índole: caminaos, carreteras, energía, transporte y sanitaria”, dijo.
Navarro enfatizó en que este proceso de hizo de la mano de “una fuerte y potente alianza público privada que permitió que la infraestructura llegara los niveles que hoy tenemos. Seguimos pensando que este es el camino que tenemos que retomar. De la mano de la privatización de las empresas sanitarias y una inversión cercana a los US$9 mil millones entre el 2000 y el 2022 se pudo alcanzar el tiempo récord el saneamiento de prácticamente el 100% de las aguas servidas del país”.
Con esto, Chile se posiciona como el único país de américa latina con tratamiento total de aguas servidas, y como parte del 28% de la población mundial que vive en zonas libres de contaminación de aguas servidas, detalló Navarro.
Asimismo, manifestó que hay nuevos desafíos a los que hay que hacer frente, como los que implica el cambio climático, con menos agua y mayor eventos climáticos extremos. “Bajo este escenario la industria sanitaria plantea invertir más de US$10 millones para velar por la seguridad y continuidad del servicio”, afirmó.
Para que las inversiones se lleven a cabo, Navarro insistió en los principales factores que deben darse en el país y en los que hay que trabajar para volver a crecer: la recuperación de la seguridad, una carga tributaria que converja en niveles más competitivos y la necesidad de contar con una certeza jurídica al momento de emprender e invertir.
“Tenemos un enorme desafío como país. Volver a poner a Chile en senda del progreso es una obligación con los millones de chilenos que anhelan vivir en condiciones dignas. Más inversión con un cuidado riguroso del entorno y medioambiente permite la creación de mejores empleos y todo lo anterior mejora las condiciones para que las familias aumenten la recaudación y le permita al estrado cumplir con su rol de manera amplia”, concluyó.