El presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Ricardo Mewes, salió a explicar este viernes las declaraciones que realizó ayer jueves en una entrevista con radio Universo, donde al ser consultado respecto de la resolución en el Congreso pidiendo la renuncia del ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson, y las posibilidades, en ese contexto, de llegar a un acuerdo en el pacto fiscal y la reforma de pensiones, dijo que “más vale ponerse colorado una vez que rosado cien veces y creo que las decisiones hay que tomarlas, para eso nos gobiernan”.
Y añadió en la ocasión que “aquí tenemos un Presidente que tiene que tomar esto con la mayor firmeza porque, nos guste o no, esto le está pasando en su gobierno y él tiene que liderar todas las conversaciones con todo el mundo político para ver cómo salimos de acá, y bueno, muchas veces habrá que hacer los sacrificios que correspondan”, sostuvo.
Tales dichos generaron una fuerte respuesta del Ejecutivo, primero a través del ministro de Hacienda, Mario Marcel, quien le respondió duramente: “No recuerdo a un dirigente empresarial que se pronuncie respecto de la decisión de mantener o no a un ministro en el gabinete”, lanzó el jefe de las finanzas públicas.
“Vivimos en un país con régimen presidencial, donde es el Presidente quien decide sus equipos de colaboradores, y, por lo tanto, me parece que es un tema que no corresponde a un liderazgo gremial”, agregó Marcel.
Por su parte, la ministra del Interior, Carolina Tohá, que ya había criticado esas declaraciones ayer, este viernes volvió a la carga: “Todos tenemos derecho a tener opiniones sobre los ministros, tenemos derecho a pensar que son buenos o son malos, que sería bueno sacarlos, cambiarlos a otro cargo. Ese no es el problema, el problema es cuando se hacen presiones públicas sobre el Presidente de la República, y no de parte de cualquiera, sino de un mundo que tiene la influencia y el poder que tiene el mundo empresarial”, señaló.
Y siguió en su planteamiento: “Un sector que es tan poderoso, que es tan influyente, no puede pensar que puede influir y presionar en los cambios de gabinete. Hay que saber cuándo uno tiene que quedarse en silencio, cuando tiene que omitir ciertos temas, cuando hay que buscar con discreción salirse de ciertos debates, porque lo que se genera si no en la sociedad es que se debilitan las instituciones”.
La respuesta de Mewes
Ante todo este revuelo, y al ver que las críticas de las autoridades de gobierno se mantenían en alto, esta mañana Mewes envió una declaración pública. En ella aclaró sus dichos, descartó que haya solicitado la renuncia del ministro Jackson y argumentó que sus palabras fueron mal interpretadas.
“Tengo claridad absoluta que la decisión de designar o remover ministros de Estado es una facultad exclusiva del Presidente de la República”, señaló. En ese contexto, añadió que “nunca ha sido mi intención tratar de interferir en esta facultad, pues sería del todo improcedente. Se hizo una interpretación errada del sentido de mis palabras”, buscando poner fin a la polémica.