El 2022 fue un positivo año para la industria salmonera en Chile. Esto, en parte, gracias a la consolidación de la demanda de salmón, la cual se viene dando desde 2021, luego de los momentos más complejos de la pandemia. Por lo mismo, Arturo Clément, presidente de SalmonChile se muestra optimista para este 2023. Pese a lo anterior, el líder gremial apunta a una compleja situación que se vive en el sector debido a los robos de salmón, los cuales, dice, van en ascenso y han aumentado en su organización y sofisticación.

La cifra de exportaciones llegó a los US$6.600 millones el año pasado, monto récord para la industria, y el volumen de las exportaciones también creció, aunque de manera más bien marginal, cuenta el presidente de SalmonChile, quien lo explica por el alza de precios y el aumento al valor agregado.

Con lo anterior, y producto del dinamismo en la demanda en los principales mercados, “se mantuvo un precio bastante positivo durante todo el año. Así que, desde ese punto está bien positivo”, agrega el líder gremial.

Sin embargo, los efectos de la pandemia igualmente se hicieron sentir en la industria. En ese sentido, el presidente del gremio asegura que con todos los problemas logísticos y la guerra entre Rusia y Ucrania, se dio un aumento de la mayoría de las materias primas que componen el alimento del salmón, además de un incremento de los costos.

“Pero, en definitiva, es un año positivo, y en la medida en que se van repitiendo los años positivos se marca una estabilidad y nos genera la posibilidad de seguir proyectando nuestra industria en forma más sustentable año a año”, agrega.

Hasta el año pasado el salmón había sido el segundo producto más exportado de Chile, pero fue superado por el litio. De acuerdo a cifras de la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales (Subrei), el litio se posicionó en 2022 como el segundo producto de exportación después del cobre, con embarques por US$ 7.763 millones, quedando en tercer lugar el salmón.

“El litio nos superó. Fue impresionante el aumento del litio, superaron los US$ 7 mil millones de dólares. Pero lo más relevante es que el salmón es el principal producto de exportación de Chile no minero. Y eso revela la importancia de nuestro sector”, señaló el líder gremial.

A lo anterior agrega que, de todas formas, con el correr de los años la industria salmonera ha ido escalando posiciones en las exportaciones del país. “En algún momento la fruta fue mayor que nosotros, también las exportaciones forestales, pero ya en los últimos años nos hemos ido consolidando como el producto más importante no minero del país”.

“La situación del 2023 puede que sea muy parecida a la del año recién pasado. Es decir, vemos con cierto optimismo los mercados, aunque han pasado tantas cosas en los últimos años que uno nunca sabe qué es lo que puede venir”, asegura el presidente de SalmonChile sobre las proyecciones para la industria.

De no ocurrir situaciones extraordinarias, dice, todo parece indicar que 2023 va a ser un año muy similar al anterior. “El salmón es un producto tremendamente valorado en los distintos mercados porque, desde el punto de vista de la sostenibilidad, es mucho mejor que las demás proteínas. Y porque además es un producto muy saludable. Eso hace que aún cuando las situación económica en nuestros principales mercados no sean las mejores, siga teniendo una demanda tan relevante”, puntualiza.

En línea con lo anterior, con los niveles de consumo de los chilenos que han ido sostenidamente a la baja en los últimos meses, Clément señala que, en el caso del salmón, se da precisamente lo contrario.

“El consumo en todos nuestros mercados, si bien no ha presentado bruscas subidas, ha ido sostenidamente al alza. La demanda de salmón sigue creciendo y nos permite seguir trabajando con los precios que tenemos y eso también le da una tremenda base sostenible para poder seguir desarrollando nuestra industria hacia adelante”, agrega.

Una de las principales preocupaciones de la industria, y que se ha recrudecido con el paso del tiempo, es el robo de salmón. Al año, la cifra de los robos puede llegar a los US$70 millones y US$80 millones.

“Lamentablemente la situación cada día empeora más”, asegura Clément, y agrega que actualmente existe una organización criminal operando de forma permanente y que ya prácticamente todas las semanas se produce un robo, los cuales -cada uno- pueden ascender a los $200 millones.

Frente a dicha situación, el líder gremial asegura que han estado tomando todas las medidas necesarias. “Nosotros tenemos una fiscalía interna donde hacemos las denuncias y estamos trabajando con las policías y todas las autoridades, de tal forma perseguir, prevenir y evitar esto que realmente es complejo y es un problema para nuestra industria”.

En los últimos años la situación ha ido en aumento, dice Clément, y especialmente desde el año pasado, cosa que se ha seguido sosteniendo en el primer mes de 2023.

“Francamente estamos sorprendidos de la cantidad de robos, de la sofisticación y de la organización que hay detrás de ello. Esto no es algo puntual, sino que ya existen organizaciones detrás de esto, y esperamos seguir trabajando con las autoridades y con las policías para poder abordar de forma eficiente este tema”.

Ahora, en materia legislativa, en noviembre pasado el subsecretario de Pesca y Acuicultura, Julio Salas, anunció que en el último trimestre de 2023 se presentará un proyecto de ley relacionado a la acuicultura.

Dicha ley, el líder gremial la califica como una “muy buena idea”, ya que uno de los propósitos de la industria es poder tener una visión de largo plazo. “Y si esta ley va a contribuir a ello nos parece súper positivo. Le hemos señalado a las autoridades sectoriales que estamos super abiertos a trabajar con ellos, en un diálogo abierto, transparente, positivo, para poder tener una mejor legislación y que se tengan mayores certezas, que entregue un mayor ordenamiento territorial y podamos proyectar de forma sostenible la industria”, agregó.

Sobre el avance de esta ley, Clément afirmó que el subsecretario de Pesca entregó un cronograma según el cual en abril se comenzaría un trabajo prelegislativo con diversos sectores de la industria, “pero es un proceso relativamente largo, por lo tanto, por el momento está el anuncio, el cronograma de trabajo y la disposición de nosotros a trabajar de forma muy coordinada en buscar una mejor legislación para la salmonicultura”.

Otro de los puntos que destacó el presidente de SalmonChile es el trabajo que ha buscado realizar la industria en términos de sostenibilidad. Dicho proceso, cuenta, se inició en 2006.

“Hemos trabajado fuertemente en el tema del alimento, donde hoy día la mayoría del alimento viene de fuentes sostenibles vegetales y la composición que tiene en términos de componentes marinos es muy mínima -10% o 12%- cuando en los inicios de la industria tenía un 80%, por lo tanto el impacto sobre la pesca pelágica es bastante menor”, ejemplifica.

Actualmente, cuenta, la industria se encuentra trabajando además en proyectos de economía circular. En ese sentido, menciona el procesamiento de las mortalidades en harina o aceite de pescado o pastillas de Omega 3, el reciclaje de redes y plásticos, entre otros.

“Estamos tremendamente alineados en distintos factores para poder hacer de nuestra industria más sostenible aun cuando la salmonicultura tiene más baja huella de carbono que la otra industria de proteína, y también una muy baja huella del agua. A pesar de ello, nosotros queremos seguir avanzando en toda aquella brecha y hacernos más sostenibles y poder tener el menor impacto medioambiental”, concluye el presidente de SalmonChile.