"Este es un tema particularmente complejo porque es un tema de economía virtual, que se mezcla con lo financiero y que tiene complejidades bastante altas". Con esas palabras se refirió ayer el presidente del Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC), Enrique Vergara, a la causa judicial de criptomonedas que hay en la instancia. En esa línea, tras la cuenta pública del organismo, Vergara confesó: "Hemos tenido que estudiar criptomonedas".

Las declaraciones del líder del TDLC ocurren a menos de un mes de que dos plataformas de criptomonedas recurrieran a este tribunal para revertir el cierre de cuentas que ha hecho la banca a ambas entidades. Se trata de Buda.com y CryptoMKT, donde ambas firmas son representadas por Mario Bravo, socio de Estudio Bravo.

"Ambas empresas demandaron a diez bancos, por lo tanto va a ser un proceso bien engorroso, muy difícil, porque es bien técnico. De este modo, va a ser un juicio largo, debería durar un año, un año dos meses, y eventualmente si llegamos a la Corte Suprema, seis meses más", comenta Bravo.

Con todo, la primera decisión que ha tomado el TDLC en la causa, fue un triunfo para las plataformas de criptomonedas: con tres votos a favor y dos en contra, el Tribunal decretó una medida precautoria, por lo que los bancos que cerraron cuentas a ambas plataformas, tendrán que volver a abrirlas, al menos mientras dure el juicio.

Aunque el TDLC ya decretó la medida precautoria, los bancos aún pueden presentar una reposición -hasta este jueves- para evitar la apertura de cuentas. "Esperamos que sea rechazada por el Tribunal, y si se rechaza, inmediatamente se tendrían que abrir las cuentas", comenta Bravo. Una vez que ocurra lo anterior, los bancos tendrán 20 días para contestar la demanda que presentaron ambas plataformas.

"En Chile se puede desarrollar cualquier actividad económica que no vaya contra el orden público y las buenas costumbres, así lo dice la Constitución, y por lo tanto, para realizar una actividad económica, no es necesario que primero esté reglada. Uno puede desarrollar cualquier actividad económica, no tienes que esperar a que haya una ley que regule tu actividad para desarrollarla, y esa es una gran ventaja para el país", asegura Bravo.

Con todo, el abogado de ambas firmas que transan criptomonedas ejemplifica con Uber, que es una actividad no regulada en Chile, y está funcionando en el país gracias a este principio constitucional. "Uber tiene cuentas abiertas en todos los bancos, ¿por qué los bancos no les han cerrado las cuentas a ellos? Si incluso más, luego de no dar razones por el cierre de cuentas, dieron una serie de justificaciones, que fueron cambiando, y una de las razones que dicen ellos es que puede prestarse para delitos de lavado de dinero, financiamiento del terrorismo, etcétera. Bueno, un grupo de mafiosos perfectamente podría comprar autos y comenzar a operar como Uber, y podría ser una actividad que se prestara para este tipo de actividades ilícitas, pero los bancos no les han cerrado sus cuentas, y no las han cerrado porque Uber no es competencia de los bancos, en cambio, estas operadoras, sí son competencia", argumenta.