El anuncio, en octubre de 2022, apuntaba a algo inédito que terminaba una larga sequía de empresas chilenas abriéndose a bolsa: Prize, la empresa frutícola fundada por Alejandro García-Huidobro hace ya 17 años, había logrado un acuerdo con una SPAC, vehículos creados en Estados Unidos para su posterior fusión con aspirantes a cotizar en Bolsa, para abrir la firma fundada en Requínoa al Nasdaq. El cronograma apuntaba a que las acciones de Prize estarían cotizando sus acciones tan temprano como en el primer trimestre de 2023. Ha pasado casi un año y el debut aún no se produce.

García-Huidobro admite que pecó de optimista, pero asegura que los planes para convertirse en una firma globalizada siguen vigentes. Lo mismo creen los fundadores de la SPAC Rose Hill, que han ido actualizando la operación en los registros de la Securities & Exchange Commission (SEC). Inicialmente, el acuerdo vencía el 17 de julio, pero fue renovado hasta enero de 2024. Si no se abre a esa fecha, la SPAC se disuelve.

“Es importante considerar que en un comienzo se definieron tiempos superambiciosos para un proceso muy exigente en auditorías y asuntos legales, y que tomó más tiempo del presupuestado pero que está bien encaminado. Pero, sin duda alguna, lo más relevante en este cambio de plazos fue que nosotros quisimos esperar por la situación mundial de fines del año pasado y principios de este”, afirma García-Huidobro.

En 2022, Prize abrió sus cifras y sus proyecciones. La compañía mide sus negocios por temporada, las que cierran en octubre de cada año. La que terminó en ese mes de 2022 lo hizo con ventas por US$112 millones y un Ebitda de US$20 millones, según reportó Prize. Sus pronósticos eran optimistas para la temporada que termina en octubre próximo: la facturación crecería un 46% y el Ebitda más que se duplicaba, a US$42 millones. La frutícola concentraba sus actividades en cerezas (65% de las ventas) y arándanos (15).

“Estamos teniendo una temporada récord y en el segundo semestre veremos materializados los números de ventas y Ebitda en rangos que superarían lo que proyectamos. Incluso el Ebitda se estaría más que duplicando”, dice su fundador a Pulso. “Además, estamos comenzando una temporada con precios y perspectivas muy positivas en Perú”, agrega.

Los plazos no son perentorios para la apertura al Nasdaq. “Como empresa no tenemos apuro y podemos esperar al momento adecuado para tomar las mejores decisiones”, dice. “Tenemos tiempo, el proceso está abierto hasta enero del 2024, y estamos esperando el momento adecuado para tomar la mejor decisión”, insiste. La operación con Rose Hill, sin embargo, ha tenido algunos otros inconvenientes. En julio, el Nasdaq comunicó a Rose Hill su decisión de deslistar a la SPAC, por incumplir metas de tener un cierto número de acciones en el mercado público. Rose Hill podía apelar y ha manifestado en la SEC su decisión de hacerlo.

El diseño original era recaudar unos US$65 millones, con lo cual los inversores nuevos tomarían cerca del 20% de la propiedad y García-Huidobro conservaría un 80%. Pero ese diseño original podría variar. Aunque su dueño no quiere entregar luces sobre aquello, Prize tiene otra opción: incorporar socios estratégicos, inversionistas anclas que han estado revisando la empresa en el último año, a su propiedad. Sería quizá un pequeño desvío en el camino desde Requínoa a Nueva York.