Un nuevo ajuste sufrieron las expectativas para el crecimiento de país. De acuerdo al Latín American Consensus Forecast el PIB de Chile se ubicará en 2,8%. Esto es una décima menos que lo previsto en junio. La previsión se ubica en línea con lo estipulado por la última Encuesta de Expectativas Económicos que sitúo la expansión en 2,8%.
La proyección va dejando desactualizada la estimación de Hacienda de 3,2%, y sitúa casi en el piso del rango del Informe de Política Monetaria (IPoM) de junio de 2,75% y 3,5%.
La proyección del próximo año se mantuvo en 3,2%.
De concretarse estas expectativas, Chile se ubicará en el tercer lugar de América Latina detrás de Bolivia y Perú que mostrarán expansiones de 4% y 3,3% respectivamente.
La menor estimación va en línea con lo que muestran los indicadores líderes, los cuales anticipan una lenta aceleración para el segundo semestre. De hecho, las expectativas para el segundo semestre se sitúan entre 3,5% y 3,7% promedio, lo que llevaría a un crecimiento anual de 2,7% y 2,8%.
¿Cuáles son esos indicadores? De acuerdo a EuroAmerica, las expectativas empresariales y de consumidores siguen replegándose dentro de terreno pesimista, particularmente las segundas. Esto último limita fuertemente las expectativas de consumo de bienes durables.
Las importaciones de bienes de capital, en tanto, continúan desacelerándose, e incluso muestran caídas interanuales, mientras que las de consumo se contraen significativamente. En tanto, el crecimiento de las colocaciones bancarias se ha desacelerado marcadamente en junio, particularmente las comerciales y de consumo, mientras que las de vivienda tienden a mantenerse estables.
La proyección del próximo año se mantuvo en 3,2%.