Finalmente ayer se realizó la elección del nuevo presidente de la Asociación de Bancos (Abif), y la votación fue unánime por José Manuel Mena.
La última asamblea de Segismundo Schulin-Zeuthen al mando de la Abif empezaba a las 8.30, pero fue a las 8.10 cuando llegó el primer vicepresidente de la banca hasta las dependencias de la entidad gremial, Pablo Granifo, de Banco de Chile. Cinco minutos después llegó quien sería electo presidente de la Abif.
En su discurso despedida, Schulin-Zeuthen señaló que el proyecto de ley de fraude con tarjetas que intenta dar toda la responsabilidad a la banca atenta "contra el desarrollo de una economía con menos efectivo (cahsless economy) y desarrollos propios del sistema de pagos (tecnologías, productos, etc.), entre otros", y apuntó que se podrían estar vulnerando ciertas garantías constitucionales.
De hecho, esta iniciativa también parece haberse tomadola agenda del nuevo presidente de la entidad gremial. Sin ir más lejos, el mismo gerente general de Scotiabank, Francisco Sardón, dijo que este será el desafío más urgente del líder de los bancos.
El mismo Mena habló ayer sobre este proyecto tras asumir el mando del gremio. "Es un proyecto que nos preocupa, pensamos que es posible mejorarlo de forma sustantiva, en protocolos, formas de resguardar que los productos financieros sean bien utilizados", dijo.
La principal crítica es que sea un solo actor el que deba hacerse cargo de todos los fraudes, en este caso la banca. En ese sentido, dijo que "nos parece que tiene claramente elementos de inconstitucionalidad".
A lo mismo apuntó Sardón tras la colocación de un bono verde de Aguas Andinas, donde Scotiabank fue el agente colocador: "Pienso que los fraudes no pueden ser adjudicados unilateralmente a uno de los actores cuando no se tienen los antecedentes de por qué razón se producen. Tiene que haber un proceso en el cual se determine de quién es la responsabilidad cuando ocurre un fraude".