Los criterios ESG que miden el desempeño de las grandes empresas en el área medioambiental, social y de gobernanza (ASG en español), se han transformado casi en un estándar. ¿Pero qué pasa en las pymes? Un estudio elaborado entre Sistema B Chile y Endeavor muestra que las pequeñas y medianas empresas chilenas cumplen esta metodología en un promedio del 45%.

El informe, denominado “Iniciativa Chile Sostenible 2023″ (ICHS), que se hace en colaboración con Banco Bci, EBCO, Explora y Red Megacentro, tiene dos partes. Por un lado, un instrumento de autoevaluación denominado “Test de Sostenibilidad”, y una serie de focus groups para identificar desafíos y oportunidades en la incorporación de prácticas sostenibles.

Con respecto al test -donde se obtuvieron respuestas de más de 500 empresas- los resultados se clasifican en tres categorías, según la puntuación obtenida. Un puntaje superior a 25 se considera alto rendimiento, entre 10 y 25 es rendimiento medio, y menos de 10 indica bajo rendimiento. Al sumar los puntajes promedio, las empresas alcanzaron una puntuación total de 14,42 sobre 32, representando un cumplimiento del 45%. “Esto demuestra que aunque han implementado algunas prácticas y políticas, es necesario un compromiso más profundo y avanzar en estos temas en el camino hacia la sostenibilidad”, dice el estudio.

Sólo para hacerse una idea, según un reciente estudio de la compañía SAP, el 67% de las grandes empresas chilenas tiene una estrategia definida con respecto a la sustentabilidad, cifra que supera el promedio de América Latina. Aunque otros estudios indican que en este segmento del sector privado, el involucramiento con los temas ESG es aún mayor.

Volviendo al ICHS, en el ítem de gobernanza el cumplimiento promedio alcanzó al 57%. En esta área, las empresas tienen un desempeño superior al 78% en aspectos como brecha salarial y salario digno. Sin embargo, muestran un desempeño inferior al 78% en brecha salarial de género, propósito, prácticas y políticas, transparencia (incluyendo los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que se encuentra en un nivel de rendimiento de 21%).

Con respecto a la parte de medioambiente del ESG, las pymes logran el 40% de cumplimiento en promedio. Ningún tema clave alcanza un rendimiento superior al 78%. Áreas críticas como agua y productos se sitúan por debajo del 31%.

Por último, en relación al área social, donde consiguieron un promedio de 42% de cumplimiento, ningún tema clave supera el 78%. Subáreas como la diversidad de líderes, seguridad, evaluación de desempeño y feedback de trabajadores están por debajo del 31%.

Con respecto a los focus groups, la investigación desarrollada por Endeavor y Sistema B, uno de los hallazgos principales fue la identificación de desafíos significativos como la resistencia al cambio organizacional, la necesidad de una mayor educación y comunicación efectiva en temas de sostenibilidad, y la relevancia de establecer alianzas estratégicas para el logro efectivo de los ODS.

La investigación concluye, además, que uno de los grandes desafíos como país está en la disparidad entre las grandes empresas y las pymes en términos de sostenibilidad. “Mientras las grandes empresas han internalizado conceptos sostenibles debido a la obligación de informar o a la presión de los inversionistas, las pymes, especialmente las de la muestra del test realizado para este estudio como las evaluadas en la Caracterización 2022 de ICHS, se encuentran rezagadas, con un desempeño inferior al que se espera. Se vuelve imperativo mejorar estos indicadores para cerrar la brecha”.