Fueron US$1.800 millones los que movieron en 2017 las 15 firmas que integraban la Asociación Fintech a diciembre. Una de ellas, es la plataforma de crowdfunding Cumplo, que actualmente se posiciona como la más grande de su tipo en el país, intermediando entre $7.000 y $8.000 millones mensuales en financiamiento, mientras que en la misma industria, el flujo en RedCapital es de $3.000 millones al mes.
Las fintech han ido ganando cada vez más terreno en el mercado local, lo que ha llamado la atención de los reguladores. Sin ir más lejos, la coordinadora de Mercado de Capitales del Ministerio de Hacienda, Catherine Tornel, anunció la semana pasada que la cartera, "en conjunto con las otras autoridades financieras que conforman el Consejo de Estabilidad Financiera (CEF), trabajarán en una regulación para fintech en general, que no sólo incluirá un marco para criptomonedas, sino que también otras fintech, como por ejemplo crowdfunding y sandboxes".
Aunque no existen cifras oficiales sobre este mercado en el país, en su último Informe de Estabilidad Financiera (IEF) el Banco Central recopiló información de distintas fuentes para tener una visión del sector.
¿El resultado? Hasta 2016 Chile era uno de los países de Latinoamérica con mayor volumen de financiamiento alternativo, alcanzando los US$98 millones, siendo superado por los US$114 de México. En términos de crowdfunding en Chile, plataformas a través de las cuales empresas y personas pueden conseguir préstamos de diversos inversionistas, los montos para el período 2012-2016 alcanzan los $966 millones en donaciones, $1.788 millones en aportes de capital, $1.019 millones en operaciones a personas, $36.244 millones en operaciones respaldadas por Sociedades de Garantía Recíproca (SGR), y $76.621 millones en operaciones respaldados por facturas.
Con todo, según cifras de Finnovista, al cierre del año pasado eran 75 las empresas fintech en Chile, donde el mayor número de plataformas se concentraba en el segmento de "pagos y remesas", con 23 firmas. Esto se compara, por ejemplo, con las 700 empresas de este tipo que tiene México, las 230 de Brasil, 124 de Colombia, y 110 de Argentina. En tanto, Perú se posiciona por detrás de Chile con 45, y Ecuador con 31.
Para Christian Real, presidente de Chita -fintech dedicada al factoring-, México es un modelo a seguir. "Es un país que ha tomado la delantera en Latam, primero, regulando con medidas administrativas el funcionamiento de Uber y Cabify, luego aprobando en marzo pasado la ley que regula a las Instituciones de Tecnología Financiera y, ahora, desarrollando una regulación secundaria para las fintech que se dedican al fondeo colectivo (crowdfunding) y para las de pago electrónico. Brasil es otro país desarrollado con players como Nu-Bank", comenta.
"Por eso es importante la señal de Hacienda y del Banco Central... Si Chile no avanza, corre el riesgo de dejar modelos de negocio en el limbo legal y por lo tanto retrasar el desarrollo del país", agrega Real.
"Entre los desafíos más inmediatos, es posible mencionar los riesgos a los que están expuestos los usuarios de las denominadas criptomonedas", dijo el Central en el IEF. Sin embargo, el ente emisor aún no considera los criptoactivos como un riesgo para la estabilidad financiera. Y para entender el motivo, basta con ver unas cifras: Google vale más que el total de las criptomonedas que hay en el mundo, por dar un ejemplo.
Con todo, antes de que la banca le cerrara las cuentas a la plataformas de criptomonedas del país, CryptoMKT llegó a transar US$65 millones, mientras que Buda movía unos US$15 millones al mes.