"Solucionar el problema de las pensiones en Chile no se agota simplemente con incrementar el pilar solidario y, por lo tanto, también tenemos que avanzar en el pilar contributivo". Así de clara fue ayer la ministra del Trabajo, María José Zaldívar, durante la discusión en la Comisión Mixta del alza de 50% en las pensiones solidarias.
Y si bien el gobierno ahora pondrá mayor foco en la ley corta para despachar pronto el proyecto del pilar solidario en los próximos días, de todas maneras el Ejecutivo trabaja a toda máquina en las negociaciones para llegar a un acuerdo en el mecanismo de solidaridad que se utilizará en la reforma de pensiones donde se discutirá el pilar contributivo, la cual esperan que sea aprobada antes de marzo-abril del próximo año.
Con este telón de fondo, ayer el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, aclaró en la Comisión Mixta de Presupuestos que "el gobierno está dispuesto a contribuir con recursos fiscales para acelerar la transición de la gradualidad del 5% adicional (de cotización), de forma tal de hacer tangible el beneficio hoy para las personas del pilar contributivo, es decir, la clase media". La idea es que en los primeros años después de aprobada la ley, el Ejecutivo ponga fondos para que los beneficios solidarios se vean reflejados antes de que esté totalmente implementada la cotización extra.
Pero no es el único avance que han hecho en el último tiempo en las negociaciones: el gobierno ya tiene definido que la cotización extra destinada a la cuenta individual, será menor a lo contemplado inicialmente. Hasta hace un par de semanas lo estipulado era un 4% para la cuenta individual y un 1% para solidaridad, pero ahora se abrieron a que la fórmula sea un 3% y 2%, respectivamente.
Esto es lo que pedía la DC en su momento, y está en línea con lo que solicitaba el resto de los partidos de oposición, como el PPD y el PS, quienes querían que se aumentara el monto destinado a solidaridad. De todas maneras, aún hay parlamentarios que esperan que pueda ser mayor el esfuerzo para solidaridad.
"Lo que hemos estado trabajando durante esta últimas tres semanas con distintos técnicos de la oposición, es ir buscando cuál es el mejor mecanismo para hacer solidaridad con estos recursos y que lleguen los aumentos lo antes posible y de la manera más sostenible en el tiempo. Y estamos absolutamente disponibles para trabajar con todos e ir mostrando cuáles son los resultados de estos avances. Por lo tanto, manifestamos nuestra total voluntad para ir perfeccionando eso", dijo ayer la ministra Zaldívar.
Por otro lado, si bien el gobierno manifestó su apoyo a poner suma urgencia a la reforma previsional que hace foco en el pilar contributivo, algunos parlamentarios no estarían de acuerdo. De todas maneras, el Ejecutivo está afinando detalles y acuerdos para poder ingresar pronto las nuevas indicaciones que acelerarán la discusión de esta iniciativa.
"La indicación respecto del proyecto de pensiones no se ha vuelto a ingresar, porque estamos justamente en esta negociación. Si se estaba haciendo un trabajo en lo que decía relación con el pilar solidario (…) la indicación al proyecto de pensiones solamente debemos enfocarla en el pilar contributivo y a mejoras tanto a la regulación de la industria como a las facultades de la Superintendencia de Pensiones, y a otros factores más que estábamos conversando", detalló la ministra del Trabajo.
Con todo, los mecanismos que se siguen evaluando para el 2% de cotización que se destinará a solidaridad son el seguro de longevidad propuesto por el exsuperintendente de Pensiones Guillermo Larraín (DC) y las transferencias intra e intergeneracionales, que es un reparto más directo, y que fue propuesto en el proyecto de la expresidenta Michelle Bachelet.
