Una larga sesión se desarrolló ayer en la Comisión de Hacienda del Senado, en la tramitación de la Reforma Tributaria, con variados invitados entre los que destacaron Carlos Boada (de Conapyme), Francisco Selamé (socio de PWC), la experta del PS Lisette Henríquez, y representantes de trabajadores del SII.
Sin embargo, la atención se concentró en el choque de dos exautoridades: Michel Jorratt (ex director del SII) y Rodrigo Vergara (expresidente del Banco Central), quienes abordaron los temas de reintegración, efecto recaudatorio del proyecto del Ejecutivo, y en el caso del último, el efecto en el PIB del proyecto.
El primero en exponer fue Jorratt, quien señaló, ante el argumento que la reintegración no está destinada a los más "ricos", que "da lo mismo el número de beneficiados que haya en cada tramo, lo que importa es la proporción del beneficio que reciben". Para ilustrar lo anterior, estimó sobre la base de los datos entregados por Hacienda para los contribuyentes del tramo 1 (entre 0 y 13,5 UTA, es decir, con rentas hasta $660 mil), que el beneficio de la reintegración per cápita asciende a $5.394, mientras que en el tramo 7 (más de 120 UTA, con una tasa de 35% para rentas superiores a los $7 millones 300 mil) este mismo beneficio asciende a $1.850.210.
Es decir, explicó Jorratt, "si uno compara la renta per cápita por tramo, el superior gana 48 veces más que el exento, pero cuando miramos cómo se distribuye el beneficio de la reintegración, el tramo superior va a recibir 343 veces más que el tramo exento. Para que esto no fuera regresivo, necesitaríamos que ese número fuera por lo menos 46. Esta es otra evidencia que este proyecto es regresivo".
Asimismo, cuestionó nuevamente la recaudación por boleta electrónica como consecuencia de la caída de la evasión y una mejor fiscalización. "Todo eso no tiene nada que ver con la boleta electrónica, porque la evasión consiste en no dar la boleta. Y da lo mismo que la boleta se dé con un papelito o con una máquina, si no se quiere dar la boleta, no se va a dar", sostuvo, enfatizando que "no estoy diciendo que la boleta electrónica no sea buena idea (...) lo que estoy diciendo es que no es un instrumento diseñado para recaudar".
A su turno, el expresidente del BC, Rodrigo Vergara, enfatizó que el sistema integrado, como el que propone el Ejecutivo, "es superior tanto en términos de eficiencia como equidad y respecto a otros sistemas tributarios", ya que en el semiintegrado vigente "los ingresos al capital pagan más que otros ingresos y eso afecta a la inversión, por lo tanto, la integración es la forma más simple de lograr equidad horizontal y no gravar doblemente al capital".
Asimismo, rebatió a Jorratt por el análisis sobre boleta electrónica. "Me sorprendió de la presentación: dijo que no se recauda nada, pero simplifica el sistema. Para mí, las dos cosas son lo mismo, un sistema más simple reduce la evasión, más allá de la discusión específica".
El investigador senior del CEP aseguró que consideraba "excesivo" el impacto de 0,6 puntos adicionales de mayor crecimiento económico por año que prevé el Ministerio de Hacienda tenga la iniciativa una vez aprobada.
"Ese 0,6% de mayor crecimiento es una cantidad gigantesca, sería como una bala de plata. Me parece excesivo comparado con lo que he visto en la experiencia de otras reformas tributarias en el mundo", aseguró, pero matizó que "también he dicho que si fuera la mitad o un tercio de eso, sería un monto muy significativo como para hacer a este proyecto extraordinariamente importante", aseveró.