El "regalón" de Anacleto Angelini que mirará de frente al dueño de Cencosud

El fallecido empresario Anacleto Angelini apreciaba mucho y escuchaba con atención a Alejandro Pérez (67 años) cuando le hablaba de la visión de negocios de Celulosa Arauco y Constitución (Celco) -hoy simplemente Arauco-, el brazo forestal de Empresas Copec, y que el ingeniero civil hizo despegar desde la gerencia general desde 1990 a 2005.

Tanto lo apreciaba, que luego de su alejamiento de la firma, tras una fuerte presión por ser visto como el responsable político del desastre ecológico que ocasionó la masiva muerte de cisnes cerca de la planta de Celco en Valdivia, el propio Anacleto decidió incorporarlo como socio a Inversiones Angelini, donde solo participan miembros de la familia y sus más cercanos. "Cuando Alejandro ya estaba buscando otras actividades por otros lados, el grupo Inversiones Angelini lo sumó con una parte, de cerca de 0,5% o un poco menos, un gesto de deferencia al formar parte de una inversión absolutamente familiar", dice un cercano al Grupo Angelini que conoció a Pérez durante su paso por Arauco.

Es que -añade- "don Anacleto lo veía como regalón, eso es claro, pero también Alejandro tenía la habilidad de proponer cosas muy inteligentes y a don Anacleto le gustaba mucho que le conversaran de los proyectos y de las cosas que le parecían realmente interesantes como desafíos a largo plazo, hacia el futuro. Don Anacleto era una persona que valoraba mucho la inteligencia visionaria y el que Alejandro fuera una persona que tuviera el temple y la firmeza para saber llegar y cumplir los objetivos que se le proponen".

Hoy, es ese hombre el que mirará de frente a otro peso pesado del mundo empresarial. Ya no será Angelini, sino Horst Paulmann. El lunes, Pérez ingresó al directorio de Cencosud, tras ser propuesto por las AFP, junto con Mario Valcarce; un directorio complejo, donde el controlador tiene a siete integrantes -los hijos de Paulmann, Peter y Heike; Jorge Pérez Alati, Hans Eben Ivanschitz, Julio Moura y Roberto Phillipps, además de HP, como le dicen sus cercanos-, siendo solo dos los outsiders, justamente los representantes de los fondos de pensiones. Y no solo eso, el momento en el que aterriza en la compañía dista bastante del período de gloria de Cencosud. Desde el año pasado a la fecha, ha sido masiva la salida de ejecutivos, comenzando con el exgerente general e histórico de la compañía Jaime Soler, y terminando esta semana con el fin de la Gerencia de División Retail Financiero, pasando a depender de Diego Marcantonio, actual gerente de Administración y Finanzas de Argentina. A ello se suman los débiles resultados. El año pasado, los ingresos de Cencosud se contrajeron 7,8%, arrastrados por el desplome de 22% en el negocio en Argentina, y algunos especialistas han señalado que la compañía no ha sido capaz de avanzar con tanta velocidad en un proceso de digitalización en los que algunos de sus competidores, como Falabella, crecen a pasos agigantados.

En ese contexto, las AFP -con el 22,7% de la propiedad- buscarían tener una voz más activa en los planes de desarrollo del retailer. Y es ahí donde entra a jugar Alejandro Pérez. No son pocos los que lo homologan con el rol que intentó jugar el empresario Bruno Philippi, quien estuvo en la mesa durante ocho años, y terminó dejando la instancia -dicen fuentes conocedoras- cansado por la falta de respuestas y planificación de parte de Paulmann. "Varias veces le preguntó cosas tan simples como el costo del proyecto Costanera Center y no obtuvo respuesta, y así con varios ejemplos", relata un partícipe de esas reuniones. Ahora se ve en Pérez esa misión.

El empresario, ingeniero civil industrial de la U. de Chile y magíster en Economía de la Universidad de Chicago, ha sido -además de gerente de Arauco- director de empresas como Soprole, Puerto Lirquén, Empresas Copec y Entel. Actualmente, es director de Clínica Los Andes de Puerto Montt, IAB Inmobiliaria, Indisa y la Universidad San Sebastián. El empresario contaría así no solo con una trayectoria destacada en su currículum, sino también con rasgos de personalidad que hablan de un ejecutivo que no se achica en el gran mundo corporativo.

"Pérez es de una personalidad que si las AFP lo llevan es porque sin ser alemán, son en la práctica personalidades más o menos parecidas con Horst Paulmann. O sea, son personas tozudas, llevadas a sus ideas, pero inteligentes, cuerdas. Para mí, Alejandro Pérez es un hombre tan brillante, que fue el artífice de llevar a Arauco a la cumbre", dice un cercano al ahora miembro del directorio de Cencosud. "Las AFP han encontrado en Alejandro Pérez a un hombre extraordinariamente capaz, inteligente, de una personalidad muy firme, o sea, él no va a ir a ninguna parte a hacer un papel decorativo", añade.

Red de contactos

El 25 de octubre pasado, Pérez, en compañía de Andrés Navarro y Luis Cordero, llegó a las dependencia del subsecretario de Obras Públicas, Lucas Palacios. El objetivo era hablar de la Central Metropolitana de Vehículos Retirados de Circulación, una de las tantas empresas que unen al directivo con el socio de Sonda y con uno de los fundadores de la UDI. Es que también comparten en la mesa de la Universidad San Sebastián, y en la sociedad Desarrollo Inmobiliario Bellavista, firma que se ha enfrentado públicamente con el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, por no permitirles entregar una torre habitacional que si bien tiene los permisos, ha experimentado la constante oposición del municipio.

Es en ese escenario donde justamente Pérez ha sido la cara visible de las tratativas con la autoridad. Así al menos se desprende de la plataforma del lobby, donde ha sido quien -en compañía de asesores- se ha reunido con el seremi de Vivienda y Urbanismo de la Región Metropolitana, Boris Golppi, y el director ejecutivo de la oficina de Gestión de Proyectos Sustentables, Juan José Obach, justamente para abordar la incerteza jurídica en torno a los proyectos inmobiliarios.

"Alejandro Pérez es el 'cable a tierra' en todos los directorios en los que participa. Es muy enfocado en la productividad, lo que lo hace pensar muy en frío. Está a la altura de hablar de igual a igual a cualquier empresario en el país", dice una persona que ha compartido en varios directorios con él. Aún más, destaca la rapidez con los números, en cuanto a que cualquier proyecto que se plantea, él saca los cálculos rápidamente para ver si es rentable o no, tema clave hoy para Cencosud, en medio de un proceso de apertura de su negocio de centros comerciales y el eterno fantasma de pérdida del grado de inversión.

Más allá de ello, y en medio de las altas expectativas que se han generado por su presencia en el directorio, fuentes cercanas a Pérez indican que su sentir frente a este desafío es que, como cualquier director, tiene la responsabilidad de ayudar a la mesa a llevar adelante las iniciativas que tenga la empresa y que sean sensatas. De hecho, agregan que si bien el directivo está consciente de que hay muchos temas sobre la compañía que hay que analizar y evaluar, el va con la mentalidad de aportar y no de imponer. "No va con la intención de ser un contrapeso de nadie, aunque por cierto espera ayudar a convertir a Cencosud en una firma más próspera de lo que es en la actualidad".