Hombres armados robaron el miércoles una docena de contenedores con cargamento de cobre por unos US$ 4,4 millones desde el puerto chileno de San Antonio, según la prensa local, los que pertenecían a la estatal Codelco, la mayor productora global del metal.
La empresa confirmó a Reuters que “se trataba de un carga de Codelco que fue entregada a la naviera CMA-CGM para su despacho al extranjero. Existen seguros comprometidos”, sin dar más detalles.
Los asaltantes usurparon 13 contenedores y doce de ellos tenían placas de cobre que serían exportadas a China, según los medios de prensa, que dijeron que el robo se produjo a través del nuevo acceso al puerto, el principal de Chile sobre la costa del océano Pacífico.
En Chile, el mayor productor global del metal rojo, las mineras han denunciado por años el robo de productos como cátodos por parte de bandas especializadas, mientras la Policía de Investigaciones (PDI) ha informado sobre diversas operaciones en que se han recuperado varias toneladas del mineral proveniente de ilícitos.
En declaraciones publicadas por la radio Cooperativa, el capitán de la policía Gonzalo García, de la primera comisaría de San Antonio, dijo que el robo “fue un trabajo bastante planificado. Cortaron las cámaras de seguridad y una vez que cortaron las cámaras entró la otra parte de la banda a intimidar a los guardias y a los trabajadores”.
“Al momento de la intimidación comenzaron a ingresar camiones para poder sacar los containers desde su interior y para ello debieron haber utilizado 13 camiones y salir la misma cantidad. Es una banda que puede estar trabajando en San Antonio porque tenemos otros delitos de similares características en su modo de operar”, añadió.
La policía dijo que la carga estaba valorada en unos $3.600 millones.
La Fiscalía no respondió hasta ahora a consultas sobre el caso. Responsables de comunicaciones del puerto tampoco estuvieron disponibles para responder preguntas.
En octubre pasado, autoridades chilenas habían anunciado que reforzarían la seguridad en los trenes que transportan cátodos de cobre a través del vasto norte del país luego de una serie de robos atribuidos a bandas del crimen organizado internacional.