El anticiparse con programas de reactivación económica al escenario post crisis es uno de los elementos que, para el exministro de Hacienda del gobierno de la Presidenta Bachelet, Rodrigo Valdés, es imprescindible que sea puesto sobre la mesa de debate.
En materia de construcción y vivienda, el economista dijo que le “encantaría” que la autoridad tenga los proyectos listos para ser desplegados.
“Por ejemplo, el Ministerio de Vivienda debería tener los terrenos listos, los planos listos, de manera que si en seis meses más se necesita, lo podamos hacer”, dijo Valdés en conversación con radio Infinita.
Esto porque “lo que nos pasa con la política fiscal reactivadora es que se demora y llega un poco tarde, por lo tanto, es el tiempo más de prepararse que de hacerla".
Plan Colegio Médico
En esta misma línea, y el marco de su participación en el plan económico elaborado junto a otros cinco destacados economistas al alero del Colegio Médico, Valdés recordó que este programa que tiene como horizonte de tiempo de 18 meses y que establece como referencia el saldo del Fondo de Estabilización Económico y Social (Fees) calculado en US$12.000 millones, tiene como foco “construir sobre lo ya hecho por el gobierno y legislado por el Congreso”.
"Nosotros pensamos que hay algunas cosas que se pueden modificar, cambiar y perfeccionar”.
El primero de ellos, sugiere Valdés, es que en periodos de cuarentena total se tengan beneficios, como el ingreso familiar de emergencia, por ejemplo, que no decaigan en el tiempo.
El segundo sugiere ampliar el espectro de beneficiados y el monto del aporte. Este último punto, de hecho, adquiere relevancia si se considera que cuando se estaba discutiendo el Ingreso Familiar de Emergencia, uno de los nudos de la discusión fue precisamente el formato decreciente en que se presentaba.
Sobre esto, Valdés dijo que se debe a que hoy no hay un ancla compartida: "Nos pasa que el ministro Briones tiene que pelear cada peso, pero yo no creo que sea tan claro que algo más de recursos vaya a hacer una diferencia en la dinámica de deuda futura. Eso no es correcto. No dan las magnitudes si sucede que la discusión política no ayuda en nada”, agregó.
Esto pasa, a juicio de Valdés porque la discusión actual está centrada en el corto plazo, razón por la cual, hizo un llamado a “salirnos de la cuestión chica, porque precisamente donde está cojeando esto, es que si vemos al gobierno y al Congreso peleado por US$100 millones dos semana seguidas la gente no entiende mucho lo que está pasando. Es tiempo de dar más certeza”, dijo.