Este viernes Salmones Austral informó sobre sus resultados financieros al cierre del primer semestre de 2022. La firma registró utilidades por US$ 13,4 millones, monto que se compara con las pérdidas de US$ 1,7 millones en el primer semestre del 2021.
En tanto, con respecto a las ventas, la firma anotó ingresos por US$ 147,2 millones, lo que representa un alza de 5,7% frente al mismo período del año pasado.
De acuerdo al análisis razonado, el aumento se explica principalmente por el mayor precio del salmón, que llegó a US$ 5,90 por kilo WFE, lo que se compara con US$ 4,52 por kilo WFE en los primeros seis meses del año pasado.
El costo de ventas ascendió a US$ 119,3 millones, monto que es 12,9% menor a igual período de 2021. Si bien el volumen vendido bajó 19,7% hasta 24.463 toneladas, el costo de las especies avanzó 6,8% y llegó a US$ 4,56 por kilo WFE, lo que generó un margen de explotación de US$ 27,8 millones, superior en US$ 25,6 millones frente al lapso enero-junio de 2021.
Con todo, el Ebitda de la empresa alcanzó los US$ 27,3 millones, frente a un Ebitda negativo de US$ 1,7 millones anotado hace un año.
“Si bien los mayores precios del salmón contribuyeron a los buenos resultados, lo más destacable es que nuestros esfuerzos para manejar de manera proactiva los costos dieron frutos”, comentó Christian Samsing, vicepresidente de Salmones Austral.
El ejecutivo añadió que “los costos han dejado de subir y han tendido a estabilizarse. Si el mercado continúa normalizándose, esperaríamos una leve caída en el futuro”.
En cuanto a las proyecciones para el segundo semestre, Samsing afirmó que “todo indica que la industria debería mantener su sólido desempeño, con buenos precios y menores costos”.