El banco español Santander aumentó su colchón de capital en 2019 y tiene previsto que vuelva a aumentar en 2020, según dijo este miércoles en la presentación de unos resultados en los que el negocio en Latinoamérica compensó la desacelerada actividad en Reino Unido y España.
La diversificación del Santander en el extranjero, especialmente en Brasil y México, le ha ayudado a hacer frente a las difíciles condiciones con las que se han encontrado los bancos europeos en los años posteriores a la crisis financiera, pero sus niveles de solvencia han estado por debajo de los de sus competidores europeos.
La entidad había dicho en el trimestre anterior que tenía como objetivo terminar el año 2019 con un ratio de capital del 11,4%-11,5%, pero superó sus propias expectativas al decir que su ratio de capital CET1 había aumentado en 35 puntos básicos, hasta el 11,65%, y que preveía terminar el año cerca del 12%.
Las acciones del Santander -segundo banco de la zona euro por capitalización bursátil, por detrás del francés BNP Paribas - subían un 4,5%, a 3,71 euros, el valor que más subía del sector bancario europeo.
"Nos ganamos la lealtad de nuestros clientes, consiguiendo ingresos anuales récord y un fuerte beneficio ordinario. Esto nos ha permitido reforzar aún más nuestra base de capital y aumentar nuestro ratio de capital CET1", dijo la presidenta ejecutiva del Santander, Ana Botín.
Teniendo en cuenta un impacto regulatorio de 23 puntos básicos por la plena implementación de la nueva norma contable NIIF-9, el ratio de capital se sitúa en el 11,42%, frente al 11,07% de finales de septiembre.
"La gran sorpresa positiva fue la fuerte generación de capital (...) en el trimestre", dijo JP Morgan en una nota a los analistas.