A estas mismas alturas, hace dos años, la disputa por la sucesión de Bernardo Larraín Matte estaba prácticamente resuelta. El actual director de CMPC y Colbún terminaba sus dos períodos como presidente de la Sofofa en mayo de 2021 y siete meses antes, en octubre de 2020, Richard von Appen había manifestado públicamente su intención de reemplazarlo. No hubo competidores y Richard von Appen se transformó en el actual presidente de la Sofofa.

A diferencia de su antecesor, Von Appen estará solo un período de dos años en la Sofofa, ya que no seguirá siendo consejero: su último período electivo termina en mayo de 2023, cuando también deberá renovarse la mitad del consejo general de 60 integrantes electos. Y a diferencia de su propia elección, hasta ahora, a cuatro meses de su salida, aún no hay un candidato visible para la presidencia del más influyente gremio empresarial local, el primus inter pares de las seis ramas que componen la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), además de la banca, el comercio, la agricultura, la construcción y la minería.

Entre varios consejeros reina una sensación: durante enero y febrero no habrá tanto movimiento y marzo será el mes para parlamentar, definir y hasta decidir. Pero el debate soterrado ya está lanzado y entre varios de los 60 consejeros electos ya se mencionan eventuales candidaturas.

Entre los candidatos con más experiencia gremial se menciona a tres consejeros.

Uno de ellos es Heriberto Urzúa (60 años), a quien varios definen como un hombre que fácilmente concitaría el consenso. Histórico ejecutivo de Forus, la cadena de retail de la familia Swett, Urzúa fue postulado por esa empresa socia en 2021 y está en el consejo hasta 2025. En opinión de varios consultados, Urzúa reúne una condición que atrae a varios electores: es una mezcla de ejecutivo y empresario: ha participado en emprendimientos. Ya en años anteriores se ha abierto un debate centrado en esa interrogante: ¿el líder de la Sofofa debe ser un empresario que participe en el capital o un ejecutivo de empresas que solo participe en las decisiones? Hay quienes se inclinan por lo primero -como fue el caso de Bernardo Larraín o Richard von Appen, cuyas familias son accionistas controladoras de sus empresas-, pero tampoco se cierran a lo segundo. Un influyente consejero dice que lo relevante es que el presidente de la Sofofa conozca el mundo empresarial y que esa condición la puede cumplir un empresario o un ejecutivo. En el caso de Urzúa, también participa en muchos directorios como director y su rol ya excede la de un gerente. Ingeniero comercial de la Universidad Católica, además de Forus está en las mesas de Empresas SB (SalcoBrand), Agrícola Vida Nueva y Agrícola Valle Verde. Y también tiene una vida gremial activa: además de la Sofofa, participa en Icare y en Generación Empresarial. Pero Urzúa se ha descartado en privado. A quienes le han preguntado, ha repetido que no postulará a la Sofofa por la excesiva carga de trabajo que aquello significa. Liderar Sofofa exige una disponibilidad 24/7, es ad honorem y cada período dura dos años. “Uno puede seguir contribuyendo sin necesidad de estar en la presidencia”, ha dicho Urzúa a sus cercanos. “Esto es full time”, dice otro consejero.

El único reparo que algunos insinúan en el caso de Urzúa fue su condición de director de La Polar cuando ocurrió el escándalo de las repactaciones unilaterales, en 2011. Fue multado por la entonces Superintendencia de Valores y Seguros, como casi todo el directorio, por incumplir el deber de cuidado y diligencia. Sin embargo, varios de sus pares no creen que aquello sea una contraindicación. De hecho, Urzúa sacó la tercera mayoría en las últimas elecciones de consejeros de 2021, tras dos representantes de los grandes grupos: Luis Felipe Gazitúa, de CMPC, y Eduardo Navarro, de Copec.

El otro candidato que más se menciona es Gonzalo Said Handal (58 años), un consejero con experiencia gremial que es director de Embotelladora Andina -por cuya empresa fue electo en la Sofofa- y Scotiabank. Además, presidió Generación Empresarial. Y también es empresario. “Soy parte de una familia empresaria. Para mí no debiese haber esta diferencia entre emprendedores y empresarios. Fuimos emprendedores y lo seguimos siendo”, ha sostenido.

Said cuadraría otro círculo: integró en 2016 el denominado grupo de los cinco, un quinteto de empresarios que emitió una carta pública impulsando la creación de liderazgos colectivos en la Sofofa y manifestando su disponibilidad a ocupar cargos gremiales. Todos ellos lo han hecho. O casi. Además de Said, esa carta la firmaron Bernardo Larraín y Richard von Appen, quienes ya lideraron la Sofofa, y Alfonso Swett, quien dirigió la CPC entre 2018 y 2020, cuando lo sucedió Juan Sutil. El quinto era Juan Manuel Santa Cruz, consejero de Sofofa por Empresas Lipigas, quien ha tenido menos visibilidad pública que los otros cuatro. Said participó en el comité ejecutivo de la Sofofa en el período de Larraín Matte. Y si acepta liderar la Sofofa, ya cuatro de los cinco de ese grupo habrán materializado aquella renovación generacional que promovieron hace casi ocho años.

Said, igual que Urzúa, ha dicho que no aspira a dirigir la Sofofa. Pero sus cercanos creen que es más bien un “no, pero sí”. Si su nombre reúne consenso, varios creen que terminará aceptando. “Lo han llamado varios empresarios”, dice un cercano.

Otro nombre que atraía a varios consejeros es Óscar Hasbún, gerente general de la Compañía Sud Americana de Vapores (CSAV), la nueva empresa estrella del grupo Luksic, que en 2022 aportará nueve de cada $10 de ganancia del holding Quiñenco. Hasbún dirigió la recuperación de una empresa que se desangró durante años y que, gracias a la pandemia, explotó en ganancias. Hasbún ha demostrado, dicen varios consejeros, interés y habilidad por las políticas públicas. Sin embargo, no es tan solo una decisión de él: también Andrónico Luksic debe estar dispuesto a “ceder” parte del tiempo de alguno de sus ejecutivos. Y en este caso no sería posible. Aunque CSAV hoy es una suerte de sociedad de inversiones que controla el 30% del gigante Hapag-Lloyd, Hasbún también es director de la naviera alemana, de Nexans e Invexans y presidente de SAAM. “Sería el candidato ideal”, dice un consejero que admite que Hasbún no se ha mostrado disponible.

Los grandes grupos económicos, que tienen varios consejeros cada uno, tienen condiciones similares, son ejecutivos con alta dedicación a sus propios cargos. En la Sofofa, por el grupo Luksic están, además de Hasbún y Nicolás Luksic, hijo del fallecido Guillermo Luksic, Patricio Jottar (gerente general de CCU), Rodrigo Hinzpeter (gerente legal de Quiñenco) y Andrea Tokman (economista jefe de Quiñenco). El grupo Matte tiene a Bernardo Larraín Matte; el presidente de Colbún, Hernán Rodríguez; el timonel de CMPC, Luis Felipe Gazitúa; y el gerente general de CMPC, Francisco Ruiz Tagle. Y el grupo Angelini tiene tres: Matías Domeyko, gerente general de Arauco; Eduardo Navarro, gerente general de Empresas Copec, y Charles Kimber, gerente de personas y sustentabilidad de Arauco.

Ninguno de todos ellos, dice un consejero, está en condiciones de asumir un cargo tan absorbente como el liderazgo de la Sofofa. “Los negocios de los grandes grupos son muy demandantes”, dice un ejecutivo.

Otro nombre generaba cierto consenso, pero tampoco estuvo disponible: Victoria Vásquez (70 años), directora de Cencosud Shopping y Puerto Ventanas, vicepresidenta del gremio que preside Richard von Appen. Compromisos laborales y personales le hicieron rechazar la oferta.

Quieren y no lo ocultan

Una generación un tanto más joven que los anteriores nombres también ha mostrado interés explícito en incorporarse a la carrera por dirigir la Sofofa.

Una de las integrantes de ese grupo es la vicepresidenta de Sonda, Rosario Navarro (47 años), consejera del gremio electa para el período 2021-2025. Miembro del directorio de Sofofa Hub, es también socia de la consultora de gestión Idemax y directora de Comunidad Mujer, entre otras actividades, y ya habría socializado sus intenciones por participar. “Se está reuniendo con gente y viendo las necesidades de Sofofa”, subraya un consejero. “Está activa”, revela otro.

El gremio nunca ha estado presidido por una mujer, por lo que la hija de Andrés Navarro podría ser una novedosa opción en los 140 años de historia de la Sofofa. Aunque para algunos consejeros su juventud podría ser un punto en contra, otros opinan que podría ser un activo para fortalecer la posición gremial frente a un año que se ve complejo.

Otro que, según varios consultados, no ha ocultado su deseo de mantenerse en la vida gremial es Matías Concha (49 años), hijo del fallecido Andrés Concha, exsecretario general y expresidente del gremio. El exdirector de Emiliana y hoy gerente general de las sociedades de inversión del grupo Claro, Navarino, Quemchi y Marinsa, ha sido un consejero activo en el gremio y formó parte del comité ejecutivo de Larraín.

Ambas candidaturas no convencen como las de Said, Urzúa o Hasbún. Por su juventud y su peso específico. En un año clave para el sector empresarial -se vuelve a discutir la Constitución y se resuelven las reformas tributarias y de pensiones-, sus integrantes dicen que requieren una voz poderosa, fundada y fuerte, un complemento del liderazgo como el de Ricardo Mewes en la CPC, menos vistoso que el de su antecesor Juan Sutil.

Y aunque precisamente, por ello, la mayoría cree que lo más conveniente es lograr un candidato de consenso -por el respaldo gremial que aquello significa-, tampoco se descarta una competencia que no se vive en la Sofofa desde 2015, cuando Herman von Mühlenbrock venció a Andrés Navarro, el controlador de Sonda. En 2017 y 2019 Bernardo Larraín asumió sin oposición -en el primer proceso se levantó a Rodrigo Álvarez, quien luego se bajó-, lo mismo que Von Appen en 2021.

Otro par de nombres circulan en algunos círculos: el exministro de Educación Gerardo Varela, director de empresas y director de Sofofa, es uno de ellos, pero su estilo frontal -”es políticamente incorrecto”, describe un consejero- no encaja con el perfil que muchos esperan. El otro, revelan otros consejeros, es Felipe Irarrázabal (54 años), ex Iansa que ahora está ahora en el Grupo Empresas Navieras, la firma de la familia Urenda. El mismo rubro de Von Appen.

Una última opción que algunos consejeros no descartan es un regreso. Si no hay candidatos disponibles que convenzan a la mayoría, algunos mencionan la opción de un tercer período de Bernardo Larraín, quien está enfocado en los directorios y Pivotes. “Si no hay otro nombre muy sólido, pueden intentar que regrese”, opina un conocedor de los pasillos de la Sofofa. En privado, Bernardo Larraín lo ha descartado. La carrera sigue abierta.