Sectores más golpeados por la pandemia retoman actividad en Fase3

Fueron 16 meses donde toda la industria estuvo prácticamente clausurada. La pandemia del Covid-19 dejó al sector de casinos en pausa desde marzo de 2020 hasta julio. Acumularon pérdidas por US$350 millones en 12 meses. Hace dos semanas, el avance generalizado en el plan Paso a Paso y el consiguiente desconfinamiento, elevó las cortinas del rubro. Hoy, todas las salas de juego nacionales operadas por Dreams, Marina del Sol y Enjoy están abiertas. De hecho, las filiales internacionales de las compañías también han abierto sus puertas, con excepción de Enjoy Punta del Este. Y las personas ya empiezan a volver.

“Desde los primeros días hemos notado una gran actividad, la que entendemos es propia de reaperturas de comercios que enfrentan demandas contenidas e insatisfechas por muchos meses”, subrayan en Dreams. “Hemos tenido un muy buen retorno, con clientes desde la apertura hasta el cierre de las operaciones”, añade el presidente de Marina del Sol, Nicolás Imschenetzky.

El directivo detalla que en su operación en Talcahuano han tenido del orden de mil visitas promedio al día; en Calama, cerca de 300 asistentes por jornada; y en Chillán y Osorno, alrededor de 400 personas en cada uno.

Hoy, la industria no puede operar a máxima capacidad; los aforos establecidos por la autoridad limitan las visitas, lo que se traduce –a grandes rasgos- en operar con el 50% de las posiciones de juego, y una proporción similar de asistentes. “En general estamos alcanzando rangos de asistencia cercanos al 50% del nivel pre-pandemia”, apuntan en Dreams. “Esperamos que, con el avance de las comunas, de acuerdo con el Plan Paso a Paso, podamos ir retomando la oferta de entretención característica de nuestras instalaciones y así recuperar la actividad y el empleo”, agrega.

Visión similar manifiestan desde Enjoy: “El impacto de la pandemia ha sido brutal. Realmente un verdadero meteorito que nos ha empujado a contemplar un cambio completo y repentino en las circunstancias y proyecciones de la industria. Sin embargo, somos optimistas en que el escenario mejorará en la medida en que dejemos atrás la crisis sanitaria”. Añaden que, en ese sentido, aún se pueden flexibilizar ciertos aspectos, como los horarios del toque de queda.

La asistencia de público no se ha graficado con la misma intensidad en la venta de alimentos. Los protocolos no permiten comercializar productos para ser consumidos libremente en las salas de juego. De hecho, sólo puede ser en restaurantes y con distanciamiento social. Todo lo cual ha impacto en sus ingresos. “Esto, lógicamente, nos lleva a bajar a casi un tercio el volumen de ventas. Sin embargo, nos garantiza la atención de manera segura”, dice Nicolás Imschenetzky. “Ha sido de menor intensidad, pero también ha superado nuestras expectativas considerando las restricciones que afectan también a esa actividad”, puntualizan en Dreams.

Hoy, coinciden en el sector falta tiempo para que los efectos de la crisis queden atrás. Están recién partiendo –subrayan-, con aún la cautela que implica el devenir de la pandemia, y un costo económico sin precedentes. “Ahora nos queda resolver con nuestro regulador cómo interpreta el gigantesco daño económico que sufrió la industria y cómo logramos recuperar el tiempo perdido”, concluye el presidente de Marina de Sol.

La Región Metropolitana está en Fase 3 del Plan Paso a Paso hace 2 semanas, pero el sector hotelero no ha logrado repuntar. El programa Fronteras Protegidas no dejó conforme al gremio, ya que afirman que sin el ingreso de turistas extranjeros será muy difícil ponerse de pie. Estos representan un 65% de las ocupaciones hoteleras del país.

“Está bien que se hubiesen quitado los hoteles de tránsito si las fronteras se abrían, pero las fronteras no se abren. Chile es un país de turismo receptivo. Se espera y se habían tenido reuniones viendo que las fronteras se iban a abrir paulatinamente”, dijo Alberto Pirola, presidente de los Hoteleros de Chile.

Previo al Plan Fronteras Protegidas, las ocupaciones hoteleras estaban en torno al 35%, por los hoteles de tránsito, pero hoy el promedio ronda entre el 15%-17%. Eso sí, las vacaciones de invierno trajeron un cierto respiro al sector ya que la ocupación promedio bordeó el 60%.

De hecho, cifras de la Subsecretaría de Turismo, muestran que en las vacaciones de invierno (entre el lunes 12 al sábado 17 de julio) la tasa de ocupabilidad a nivel nacional alcanzó 57%, considerando 40 destinos bajo estudio. Eso no considera, eso sí, comunas relevantes para el turismo que estaban en Fase 1, como Valle del Elqui o algunos lagos del sur). Si se comparan estos 40 destinos con el nivel prepandemia (vacaciones de invierno de 2019) incluso la tasa de ocupación fue mayor frente a los 50,7% de ese año.

José Luis Uriarte, subsecretario de Turismo, dijo que “registrar una ocupación mayor a la que hubo en 2019 y que -incluso- un 25% de los destinos analizados haya superado un 70%, es una tremenda noticia para el turismo nacional. De las cerca de 170 mil empresas de turismo existentes en el país, sobre un 90% son mypes, por lo que su recuperación es clave para miles de familias, cuya fuente de ingresos lleva más de un año y medio prácticamente paralizada. Si bien este aumento responde a una fecha especial, confiamos en que, de la mano de la superación de la pandemia, el turismo se pondrá de pie”.

De todos modos, el gremio del sector aún no avizora un buen escenario. “Seguimos sumamente perjudicados y las medidas que se han tomado, se han tomado erróneamente... la pandemia llegó para quedarse y va a ser como la influenza. No podemos estar con un nivel de fronteras como se está viendo”, concluyó Pirola.

Las restricciones de movilidad permitieron darle respiro al rubro de los centros de eventos. Cifras extraoficiales apuntan a que en las últimas semanas las cotizaciones de eventos han crecido entre un 25% y un 50%.

“Hoy día hay condiciones para trabajar sobre todo en la industria formal y profesional de eventos. No así en las reuniones en las casas, donde sigue siendo más restringido. Hemos impulsado una serie de medidas para que esta vuelta sea segura para la ciudadanía”, dijo Sofía Jottar, directora de la Asociación de Eventos de Chile.

Este rubro genera 280 mil empleos de manera directa, sin embargo, debido a la pandemia se han perdido al menos 185 puestos de trabajo. Además, hay unas 9 mil pymes que se dedican a los eventos en el país. 1.500 son centros de evento y 7.500 son empresas de banquetería.

Si bien los avances de fase los han favorecido, desde Asevech dicen que aún quedan temas pendientes, como los aforos permitidos. “La norma actual nos pide 8 metros cuadrados por persona, y la norma habitual de la industria es dos metros cuadrados por persona, por lo tanto, estamos trabajando a un 25% de nuestra capacidad, y eso no lleva a ninguna industria al punto de equilibrio”, sostuvo Jottar.

El sector gastronómico ha sido otro de los que se ha visto muy perjudicado por la pandemia. Las cuarentenas, aforos y toque de queda han sido los principales obstáculos para su funcionamiento.

De hecho, de los 300 mil puestos de empleo que generan, hoy se han perdido casi la mitad. Sin embargo, la mayor apertura trae esperanza al sector.

“Poder funcionar con mayor normalidad permitirá que el 30% de las empresas del rubro que estaban cerradas, comiencen a operar y así podamos recuperar parte de esas fuentes laborales. Por eso es muy importante que se siga avanzando en la reducción del horario de toque de queda hasta su eliminación, ya que el horario de cena es fundamental para el rubro, de manera que sigamos ofreciendo oportunidades de trabajo a los chilenos”, sostuvo Máximo Picallo, presidente de Achiga.

Según las estimaciones que maneja la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), el balance, en general, ha sido muy positivo. De hecho, durante el primer fin de semana de la Región Metropolitana en Fase 3, se alcanzaron niveles de actividad similares a los que se vienen registrando de lunes a viernes, lo que, según señalan desde la entidad, significa aumentar las ventas en cerca de un 40% en relación a las semanas previas en Fase 2.

Para Paula Valverde, presidenta de la Asociación de Marcas del Retail, ratifica este comportamiento, Dice que uno de los fenómenos más llamativos desde la entrada de la RM a Fase 3 ha sido el escaso “protagonismo” del sábado y domingo como los días más fuertes en términos de ventas. “La semana está bastante más pareja, por lo que se puede concluir que el consumidor puede adaptarse a los cierres y aperturas”, afirmó.

George Lever, gerente de Estudios de la CCS, indica que esto asegura una “prolongación de las elevadas tasas de crecimiento en 12 meses” que viene mostrando el comercio minorista desde marzo. Por lo que “a medida que avance el retorno hacia los lugares físicos de trabajo, se espera que vaya disminuyendo la participación de los días hábiles en las ventas totales y que los fines de semana vayan cobrando mayor importancia”, agrega.

Valverde detalla que en el caso de los centros comerciales vinculados al retail, pese a presenciar un menor flujo de gente, es posible observar un incremento en las ventas entre un 20% y 50% respecto de las semanas anteriores ¿El motivo? “La gente que antes iba a vitrinear y mirar, probablemente hoy hace la fila porque está más decidido a comprar. Entonces si bien hay menor flujo, existe una mayor tasa de conversión”, comenta. En términos generales, precisa, hay una mayor conversión y tickets promedio más altos”.

De hecho, y según indican los datos de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), hoy el comercio minorista está vendiendo más de lo que vendía en épocas del 2019 debido a una serie de hechos clave. Bernardita Silva, gerente de Estudios de la CNC, explica que por un lado está factor psicológico o de encierro, mayor liquidez de los hogares producto de los retiros de fondos de AFP junto a ayudas fiscales y compras rezagadas por el confinamiento.

Katia Trusich, presidenta del gremio de los centros comerciales, cuenta que un estudio recientemente elaborado por ellos y Kawesqar Lab, reveló que el 69% de los ejecutivos encuestados tiene la certeza que la gente volverá a los establecimientos con la misma frecuencia que antes de la pandemia. Mientras, el 67% de los consumidores afirmó que retomará las compras en tiendas físicas, pero mantendrá también online.

Por su parte, desde Mall Plaza cuentan que a grandes rasgos, “todo indica que deberíamos volver a un flujo de visitas y de ventas similar al exhibido a fines de 2020, llegando a cifras sobre el 90% para las mismas tiendas los días de funcionamiento (Same Store Sales)”, e incluso estiman operaciones por sobre un 100% respecto a las Same Store Sales para algunos rubros.

Un panorama similar al observado por Cencosud Shopping, que durante el primer fin de semana de la RM en fase de Preparación recibió más de 420 mil clientes en todos los centros comerciales ubicados en la zona. De ellos, los más visitados fueron Costanera Center, Altos Las Condes y Mall Florida Center. La ocupación al interior de los locales “se encuentra en niveles muy altos con valores promedios que exceden el 90%”.