Solo en el segundo semestre de 2020, 165 mil usuarios reportaron a la banca haber sido afectados por fraudes en los distintos medios de pagos, por montos que totalizaron $54.000 millones (unos US$73 millones). Ese fue el primer balance de la llamada ley de fraude con tarjetas, que obliga a las entidades a devolver los montos a los usuarios cuando éstos desconocen las transacciones en distintos medios de pagos, y que entró en vigencia a fines de mayo de 2020.
El año pasado también subieron las investigaciones por fraude con tarjetas instruidas por el Ministerio Público a la policía: la Brigada Investigadora de Delitos Económicos (Bridec) reportó que si bien el número de denuncias hechas en la PDI de la Región Metropolitana disminuyó 72% llegando a 32 denuncias en 2020; las instrucciones que envió el Ministerio Público a la PDI para investigar, aumentaron un 30%, pasando de 1.511 en 2019 a 1.960 en 2020.
Los delincuentes han ideado nuevas formas para conseguir robar dinero de las personas, y de la mano de la tecnología han perfeccionado el modo de operar. Incluso han creado nuevas técnicas.
¿Cómo evitar fraudes? Mauricio Bravo, subinspector de la Bridec Metropolitana, entrega una serie de recomendaciones para los distintos tipos de fraudes con tarjetas.
Nuevos modus operandi
El subinspector de la Bridec cuenta que últimamente se ha detectado un nuevo modo de operar por parte de los delincuentes, el llamado SIM swapping o suplantación de tarjeta SIM. En concreto, una persona se da cuenta que se le cayó la señal de su celular, y la gente suele atribuirlo a un problema con la compañía de teléfono, por lo que acuden a la empresa respectiva para cambiar el chip un par de días después de no haber recobrado la señal. Sin embargo, una vez que usan el nuevo chip, ingresan a su cuenta bancaria y se dan cuenta que les robaron dinero.
Bravo explica que lo que hacen los delincuentes, es que van a la compañía telefónica, piden un chip a nombre de otra persona, ocupando su identidad, ingresan el chip a otro teléfono, por lo que se le cae la señal al usuario, y allí le empiezan a llegar las terceras claves bancarias a los delincuentes, con lo que cometen el fraude. “En eso se ha detectado un aumento”, puntualiza.
¿Qué hacer para detectar este tipo de fraudes? Bravo asegura que “es muy importante considerar que todas las empresas que prestan este servicio de telefonía, muy rara vez tienen una caída masiva del sistema, y por varios días. De hecho, si la llegan a tener, la misma empresa comunica esto a través de redes sociales”.
En ese sentido, el subinspector de la Bridec detalla que si una persona se percata que la señal de su celular se cayó por completo, debe revisar de inmediato los movimientos en su cuenta bancaria, y hacer el bloqueo de las tarjetas de forma preventiva. También debe ponerse en contacto con la compañía telefónica para ver qué fue lo que ocurrió.
“Nos ha pasado que hay personas que incluso han estado tres días sin señal, y cuando llaman a la compañía telefónica, les dicen que el servicio nunca se ha interrumpido, al contrario. Entonces, recién ahí los afectados toman conocimiento de que hay un chip duplicado”, relata Bravo.
Otra de las nuevas modalidades de estafa que está circulando, consiste en que a la persona le llega un mensaje de texto a su celular solicitando las claves bancarias, la gente lo responde y automáticamente tienen los datos asociados a sus tarjetas, cuenta Bravo.
En ese sentido, dice que es importante destacar que acá existe una interacción entre la víctima y el victimario, porque el delincuente que gesta el fraude manda el mensaje de texto para que la persona recepcione un mensaje del banco, donde le envían una tercera clave o una clave de coordenadas. Entonces, en este caso el afectado, cae en esta puesta en escena y entrega esta tercera clave o datos de coordenadas a un desconocido.
Bravo recuerda que nunca hay que entregar las claves a nadie, ya que cuando el banco lo solicita, por ejemplo, por teléfono, es una operadora la que recibe la información al digitar los números en el teléfono, pero nunca se dicta de forma directa al ejecutivo bancario.
“Cuando un tercero llama a una persona y le pide la clave de coordenadas o de transferencias, o cualquier otro dato, lo que también puede llegar por mensaje de texto; es una clara señal de alerta de que puede ser víctima de un fraude”, relata. Frente a cualquier duda, Bravo recomienda comunicarse con el banco directamente y hacer las consultas respectivas.
Sitios web
Cuando se trata de internet, Bravo detalla que es donde ocurren más fraudes. Allí llama a la precaución al ingresar a sitios web, y preferir poner directamente la dirección del sitio al que se quiere ingresar, sin pasar por el motor de búsqueda de Google, ya que muchas veces es allí donde las personas entran a páginas que realizan phishing.
También cuenta que todas las páginas web donde hay transacciones bancarias o donde los usuarios deben ingresar datos sensibles, tienen en la parte de arriba un protocolo de seguridad que por lo general aparece con letras verdes, y que dice HTTPS. Cuando el sitio web tiene ese protocolo de seguridad, es posible confiar en la página.
Pago presencial en comercios
Por otro lado, al pagar con POS (Point of Sale, o terminal punto de venta, que son las máquinas donde se paga con tarjeta) en los comercios o restaurantes, se pueden generar clonaciones de tarjetas.
Allí, Bravo recomienda preferir pagar con chip antes que deslizar la tarjeta, y el plástico nunca debe ser entregado a un tercero, teniendo siempre la tarjeta a la vista y tapando el teclado numérico para que nadie vea su clave. Es por esto que recomienda que las personas que no tengan una tarjeta con chip, puedan pedirle al banco que les modernicen el plástico. Sin ir más lejos, BancoEstado está llevando adelante ese proceso con todas las CuentaRUT.
Si la persona piensa que el POS en el que está pagando puede haber sido adulterado, debe poner una clave errónea, y si de todas formas el dispositivo emite la boleta, eso significa que esa máquina fue adulterada, por lo que hay que dar aviso inmediato al banco para que bloquee sus productos, y avisar a la policía, explica el subinspector de la Bridec Metropolitana.
Cajeros automáticos
Bravo recomienda que las personas que vayan a cajeros automáticos, revisen que no existan dispositivos extraños en la ranura donde se ingresa la tarjeta.
“Hay que ver que no exista algo sobrepuesto en la ranura donde va la tarjeta. Eso se puede palpar de forma muy sencilla, es cosa de tomar donde va el tarjetero, y hacer un poco de fuerza, si hay algún elemento extraño va a salir”, dice.
También recomienda tapar el teclado numérico del cajero automático para que nadie vea cuál es su clave. “Si no tienen la clave, no van a poder usar la tarjeta”, recuerda.