Poco después de que entrara en vigencia la Ley de la Jibia, que impide la pesca del recurso con el método de arrastre, ingresó al parlamento otro proyecto de ley que busca prohibir este sistema de captura, ahora para la merluza.
Para la Sociedad Nacional de Pesca (Sonapesca), uno de los efectos inmediatos que esta medida traería, en caso de aprobarse, "es que no se va a poder abastecer el mercado interno", comentó Osciel Velásquez, presidente del gremio. Actualmente, el 56% de lo que se pesca de merluza se queda en el mercado local.
Otro efecto se verá sobre el empleo, dado que algunas empresas que producían jibia y que debieron cerrar esas líneas, también se dedican a la pesca de merluza. Es el caso de Pacific Blue, que en agosto pasado finiquitó a 367 trabajadores asociados al recurso y que tiene otros 700 asociados a la merluza. Su gerente general, Marcel Moenne señaló que de prosperar la iniciativa se pierde tanto la continuidad en la captura del recurso como el valor agregado del producto. "Si se aprueba la medida, se cierra la empresa", señaló.
Ambas partes coinciden que el problema actual en la captura de la merluza es la pesca ilegal, que superaría tres veces la cuota asignada en el caso de los artesanales. Esto además ha bajado el precio de la caja de 30 kilos, desde los $12.000 a $18.000 (valor en caletas) a $5.000.
Para este año, la cuota autorizada de la pesca de la merluza es de 30.000 toneladas, de las que el 60% la captura el sector artesanal.