Los índices S&P 500 y Nasdaq cayeron este viernes para registrar su segunda caída semanal consecutiva, ya que los datos de los precios de producción estadounidenses, mejores de lo esperado, impulsaron al alza los rendimientos del Tesoro y hundieron los valores de crecimiento de megacapitalización sensibles a las tasas.
Es la primera vez este año que el Nasdaq registra dos pérdidas semanales consecutivas.
El Índice de Precios a la Producción (IPP) de Estados Unidos subió un 0,8% en los 12 meses anteriores a julio, frente al 0,2% del mes anterior, debido al alza del costo de los servicios. Los economistas encuestados por Refinitiv esperaban un aumento del 0,7%.
“Los datos del IPP muestran que el monstruo de la inflación aún persiste, pero los inversores pueden ver progresos en los elementos que forman parte del IPC”, dijo David Russell, de TradeStation.
Aunque los operadores esperan en general que la Reserva Federal se abstenga de endurecer las condiciones crediticias durante el resto del año, las apuestas a que no habrá un alza de tasas en septiembre bajaron al 88,5% desde el 90% anterior a la publicación de los datos.
El rendimiento de los bonos a dos años, que se mueve en línea con las expectativas de tasas a corto plazo, avanzó al 4,88%.
El S&P 500 perdió 4,52 puntos, o un 0,10%, a 4.464,31 puntos. En tanto, el Nasdaq Composite cedió 73,83 puntos, o un 0,54%, a 13.647,20 unidades; mientras que el índice Dow Jones, subió 105,52 puntos, un 0,30%, a 35.281,67 puntos. En la semana, el S&P cayó un 0,31% el Nasdaq cedió un 1,9% y el Dow sumó un 0,62%.
Mercados europeos
Las acciones europeas cayeron el viernes ante la preocupación por la posibilidad de que las tasas de interés mundiales sigan altas durante más tiempo, mientras que las acciones del banco suizo UBS subieron tras poner fin a la garantía estatal concedida para su adquisición de Credit Suisse.
El índice paneuropeo STOXX 600 perdió un 1,1%, lastrado por un desplome del 2,1% de las acciones tecnológicas e inmobiliarias, sensibles a las tasas.
Los principales mercados regionales declinaron, con un retroceso del 1,2% del FTSE 100 británico tras datos que mostraron un crecimiento inesperado de la economía en el segundo trimestre, lo que avivó los temores a más alzas de tasas por parte del Banco de Inglaterra.
El STOXX 600 cerró estable la semana, ya que los buenos resultados se vieron contrarrestados por el desplome de los bancos europeos a principios de semana, tras la decisión de Italia de aplicarles un impuesto extraordinario.
Todos los grandes sectores registraron pérdidas y el de recursos básicos cedió un 1,7%, su mayor descenso semanal en siete años, ya que los precios de los metales se vieron presionados por la debilidad de los datos económicos chinos, que alimentaron la preocupación por la ralentización de la demanda en el principal consumidor mundial de metales.
Entre los valores alcistas, el mayor banco suizo, UBS , sumó un 4,7% tras haber anunciado que no necesitará la garantía del Estado que obtuvo para rescatar a Credit Suisse.