El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, se refirió esta mañana al proyecto de Reforma Tributaria y particularmente a la posibilidad expresada por el presidente Sebastián Piñera de aumentar el impuesto a los alcoholes, en el marco de la campaña "Elige vivir sin drogas".
Sobre el punto, se limitó a señalar que "es parte de las muchas cosas que se están evaluando", mientras que concordó con las palabras del presidente del Banco Central, Mario Marcel, quien esta mañana en T13 advirtió sobre los efectos negativos en la economía por la incertidumbre de cómo se resolverá finalmente la iniciativa.
"Por supuesto que concordamos con él. Llevamos 8 meses discutiendo, hemos entregado una cantidad enorme de información y llegó el momento de tomar una decisión al respecto", sostuvo, en relación a la idea de legislar, que está programada para el próximo miércoles.
Sobre la posibilidad de "dejar caer" el proyecto en la comisión de Hacienda y jugársela por obtener los votos en la Sala, señaló que "vamos a hacer el esfuerzo para que el acuerdo ocurra en la comisión de Hacienda (...) soy optimista. Esta es una modernización profunda de nuestro sistema tributario, y goza de buena salud, con algunos embates externos, como les ocurre a las reformas. Y esperamos que haya un acuerdo, porque el país necesita esta Modernización Tributaria".
Reconoció que están evaluando las propuestas de la oposición y que "veremos si podemos llegar a puerto", rechazando nuevamente la idea de separar la iniciativa.
"IPoM" Fiscal
Las declaraciones del secretario de Estado se dieron junto con el anuncio de una serie de cambios en la entrega de la información fiscal, presupuestaria y macroeconómica, que se entregaba una vez al año y que pasará a tener una periodicidad trimestral.
Así, explicó Larraín, junto al director de Presupuestos Rodrigo Cerda, el Informe de Finanzas Públicas (IFP) que se entrega con la Ley de Presupuestos una vez al año en septiembre, pasará a entregarse 4 veces al año, y contendrá la actualización de las cifras fiscales al incluir informes financieros de nuevos proyectos, la proyección de de la Deuda Bruta, así como también las proyecciones de PIB para el país.
En ese contexto, dijo haberse coordinado ya con el Congreso para su entrega en el corto plazo con la corrección de la estimación de crecimiento para el país en 2018 que, según el IFP del año pasado, era de 3,8%, cifra que según dijo "la proyección oficial de 3,8% ha sido revisada a la baja".
Este tipo de actualizaciones en períodos más cortos es muy similar al que entrega el Banco Central en su Informe de Política Monetaria (IPoM) cuya última versión se entregó este lunes, y al World Economic Outlook del Fondo Monetario Internacional.