El subsecretario del Trabajo, Fernando Arab, lamentó la situación que afecta a los pacientes de la Clínica Dávila, tras la huelga que realizan los trabajadores y que ha implicado el cierre de las urgencias pediátrica, de adultos y maternal del recinto.
"Tendremos que analizar si el otorgamiento de servicios mínimos en su momento por parte de la Dirección del Trabajo se ajustó a derecho o fue excesivamente restrictiva como algunos nos indican, poniendo en riesgo la salud de las personas, especialmente de aquellas más vulnerables por su especial situación de salud", señaló.
En este sentido afirmó que "el derecho a huelga no puede significar nunca poner en riesgo la vida y salud de las personas, menos aún, de aquellas más vulnerables como recién nacidos que se encuentran en una unidad de neonatología, con todos los cuidados que ello conlleva".
La Clínica informó que debiso a la huelga "los servicios de Urgencias Adulto, Pediátrica, Traumatológica y Maternidad permanecerán cerrados hasta nuevo aviso. Asimismo, este prestador no se encuentra recibiendo nuevos pacientes hospitalarios. Respecto a los servicios ambulatorios, la mayoría de ellos mantendrán su operación. Sin embargo, algunos servicios no se encontrarán disponibles o tendrán atención restringida".
El cierre de las urgencias, adoptado desde el pasado miércoles, ha generado numerosos reclamos entre las casi 400 personas que, a diario, llegan hasta las áreas de emergencia del recinto, viéndose impedidas para solicitar atención. A ellos se suman los casos de pacientes que han sido derivados a otros centros de Santiago y que han sufrido cancelaciones de horas, exámenes y procedimientos.
La resolución del centro de salud privado se enmarca dentro de la huelga legal indefinida, en curso desde este miércoles a las 8.00 que, según los trabajadores, sacaría de funcionamiento a más de 700 profesionales de la clínica, dejando solo a unos 30 en ejercicio para cumplir con los servicios mínimos.