BUENAS noticias entregó en los últimos días el Ministerio de Hacienda al elevar la proyección de crecimiento desde 3,5% hasta 3,8% para 2018. Cifras que para el subsecretario de Hacienda Francisco Moreno se dan en el marco de un trabajo que da por concluida la instalación de la administración Piñera, y plantea el desafío de cumplir los ejes del programa de gobierno: crecimiento, empleo, productividad e inversión, los que, en una importante medida, deberán plasmarse en proyectos a consensuar con un Congreso reticente.
A 4 meses del inicio de la administración, ¿cuál es el balance?
-Actualizar las proyecciones de 2018 es parte de un rito republicano del ejercicio del Presupuesto. Hicimos una proyección al alza del PIB, sin lugar a dudas una buena noticia que tomamos con cautela, porque no queremos cantar victoria. En materia económica no puede haber peor situación que la autocomplacencia. Estamos trabajando en aumentar el crecimiento económico, la creación de empleo, recuperar la productividad y la inversión. En esos ejes nos jugamos buena parte del partido.
¿Fue optimista proyectar el cobre en US$3,12 la libra, ante la inminencia de una guerra comercial entre China y EEUU y la baja de su precio en las últimas semanas?
-Ha habido efectos sobre su valor en los últimos días y lo estamos mirando atentamente. Sin embargo, hay antecedentes para tener una visión positiva sin perder el debido cuidado de las proyecciones de los próximos meses.
¿Puede afectar la proyección de crecimiento?
-En el corto plazo Chile puede enfrentar de buena manera una guerra comercial. Habrá que estar muy atentos para ver cuánto dura, somos una nación abierta al mundo, tenemos tratados de libre comercio con el 80% del PIB mundial. Los organismos e instituciones internacionales que tienen como máxima tarea la promoción y la defensa del libre comercio tienen que tomar cartas en el asunto. Por lo tanto, tenemos una visión esperanzada en lo económico nuestro, pero con cautela.
Agenda legislativa
Uno de los grandes desafíos de Hacienda será llevar adelante la Reforma Tributaria. ¿Tenderán puentes con la oposición?
-Recibimos una situación fiscal bastante dañada. Eso hace que el punto de partida sea mucho más complejo. Dicho eso, en nuestro programa de gobierno está la modernización y simplificación tributaria, que no se trata de la reforma a la reforma: queremos simplificar y modernizar, donde el SII no sea una especie de caja recaudadora y que los ciudadanos se hagan partícipes del crecimiento de su país y de la buena inversión de los recursos. Esperamos que el proyecto sea bien recibido por el mundo político.
¿Habrá trabajo prelegislativo con la oposición?
-No queremos que el proyecto de modernización tributaria genere división como la primera reforma. Vamos a realizar un trabajo prelegislativo importante para ese proyecto pero también esperamos que haya un debate muy rico en el que todos los parlamentarios puedan emitir una opinión con conocimiento de lo que significa el proyecto y tengo esperanza de que los decibeles de la discusión tributaria van a ser razonables y apegados a su contenido, más que a consignas del pasado.
¿Se adelantará el ingreso del proyecto para que no choque con la Ley de Presupuestos? Ambos ingresan en septiembre
-Soy un convencido de que tenemos un Congreso Nacional muy potente que puede caminar y mascar chicle al mismo tiempo. Habrá que ver los plazos más prudentes considerando una agenda intensa de la Ley de Presupuestos. Lo más importante es que este Ministerio va a desarrollar un trabajo prelegislativo importante.
¿Se reintegrará el sistema?
-El contenido va a generar transversalidad: es muy difícil oponerse a la modernización y la simplificación.
Si bien la modernización tributaria y la Ley de Presupuestos ocuparán gran parte de la agenda, la oposición les ha acusado de "sequía legislativa". ¿Qué responde a eso?
-La sequía legislativa es una consigna más política que un análisis ajustado a la realidad. Hay un sector político que perdió las elecciones el 2017 y así como nosotros vivimos la experiencia de perder una elección en noviembre de 2013, podemos entender la frustración, especialmente del Partido Socialista. Sin embargo, siendo fiel a su propia historia, el Partido Socialista debe y ojalá que lo haga así, cambiar el giro de su oposición. Lo importante es que se den los espacios para que la tramitación de los proyectos en el Congreso sea con la altura de miras que la democracia exige y en ningún caso seguir una estrategia de guerra de guerrillas.
Aparte de los proyectos mencionados, ¿dónde estarán las prioridades legislativas?
-Estamos viendo el proyecto del Consejo Fiscal Asesor; el de modernización de la Ley de Bancos; la ampliación del giro de la Bolsa de Productos Agropecuarios y la supervisión basada en riesgo para las compañías de seguro. También estamos trabajando un paquete de indicaciones en la ley de protección de datos personales; tenemos las negociaciones del salario mínimo, donde esperamos dar noticias en las próximas semanas; y estamos viendo la creación de la sociedad anónima Infisa, donde alojarán las coberturas de crédito y financiamiento de Fogape y Fogaín, además del nuevo Crédito con Aval del Estado (CAE).
¿Tienen cubierto el año con esto?
-Hemos tenido la capacidad de dar por concluida la instalación y ponernos a trabajar a toda máquina en la contingencia.