Un mensaje del servicio de compras a domicilio Cornershop, encendió las alarmas entre algunos de sus clientes: “Por el momento, algunos supermercados están con bajo stock”, informó la aplicación.
Esto coincidió con la aparición de algunos mensajes e imágenes en redes sociales, de clientes que reclamaban por la falta de algunos productos en las góndolas de supermercados.
PULSO realizó un recorrido por diversas salas de venta de las principales cadenas de supermercados del país, la que arrojó un panorama dispar. Mientras las salas visitadas en el sector oriente presentaban en general normalidad, otras ubicadas en comunas como Renca, Independencia, Puente Alto o La Florida mostraban falta de stock en algunas líneas de productos.
Consultadas las principales cadenas de supermercados, la mayoría declinó referirse oficialmente a la situación. Solo Cencosud envió una declaración en que aseguró que “los supermercados Jumbo y Santa Isabel operan con absoluta normalidad”.
Pero, más allá de eso, algunas fuentes de la industria reconocieron que en los últimos días se juntaron dos elementos: por una parte, el factor estacional relacionado con la vuelta a clases -una de las épocas del año en que más aumentan las ventas- y el retorno de los veraneantes.
Todo esto normalmente estresa la logística de la industria, obligando a las empresas a reforzarse.
Sin embargo, este año esto coincidió con las dificultades para operar que en algunos casos todavía persisten tras el estallido social de octubre del año pasado. De hecho, en su estado de resultados, Falabella -que opera la cadena Tottus- indicó que hay seis locales que todavía no pueden abrir sus puertas, de un total de 205 que opera en el país.
Otra fuente de la industria comentó que el principal factor para que esto ocurra es la estacionalidad, pues en general en esta época las ventas de supermercado aumentan, sobre todo en relación con el verano.
Sin embargo, desde otra cadena de supermercados aseguraron que a la estacionalidad se suma otro elemento, y que es un inusual incremento de las visitas y de las compras en las salas de supermercado, lo que puede deberse a la expectativa de que una situación similar a vivida durante las semanas post estallido social, con saqueos y horarios restringidos, podría repetirse, algo que hasta ahora no se ha dado.P