No fue sorpresa en la compañía que Tomás Platovsky Mingo (43), gerente comercial de Falabella Retail fuera elegido para asumir la gerencia general de Falabella Retail Chile a partir del 1 de septiembre, cuando Juan Luis Mingo −con quien tiene un parentesco lejano− deje el cargo para dedicarse a proyectos personales.
De hecho, su nombre ya se había mencionado, junto al de Mingo, cuando a comienzos de 2021 el holding reclutó a Francisco Irarrázaval desde Ripley para la gerencia general corporativa. “Era uno de los sucesores naturales validados, tiene suficientes pergaminos”, dice un ejecutivo que lleva 20 años en el retailer. El holding aplica rigurosos procesos de gestión del talento interno, con evaluaciones anuales, en los que permanentemente están identificando eventuales sucesores para diferentes cargos, lo que no obsta que también se use la grúa o se abran concursos externos.
Según fuentes internas, Platovsky mantiene una relación cercana con los directores de la firma, quienes le tienen confianza y le reconocen un espíritu innovador. En su actual cargo impulsó la estrategia omnicanal y junto a su equipo buscó tecnologías entre proveedores de distintos países. También fue uno de los desarrolladores de la nueva tienda de Falabella en Parque Arauco, que la firma presenta como la más innovadora y grande de Sudamérica. “Como en sus 15 años en la empresa ha pasado por diferentes áreas de compras y ha sido gerente zonal, conoce bien el negocio de cara al cliente; sabe que es clave detectar qué se está demandando, innovar permanentemente y estar atento a la dirección de los mercados que marcan tendencia”, dice un colega.
Con el retail en las venas
Tommy, como le dicen sus amigos, es ingeniero comercial de la Universidad Católica de Chile y cursó un advance management programme en Harvard Business School. Su primer trabajo fue en Banco Security, donde se desempeñó 10 meses en la administración de productos y servicios de la banca electrónica, desarrollo de nuevos productos y administración de cartera. En 2005 se integró como gerente de producto y ventas a la recién creada Lounge S.A., donde estuvo cerca de dos años porque le entusiasmó el proyecto de Francisco Hughes (posteriormente Lounge se incorporó al portafolio de marcas con contrato de exclusividad con Falabella). Este fue su primer acercamiento al retail, donde probó sus aptitudes en el armado de colecciones, adquisición de productos en mercados asiáticos, logística, estrategias de precio y campañas de marketing.
Claro que ya conocía de cerca el mundo del comercio porque nació en una familia ligada a esta actividad: su abuelo, el empresario chileno-checo de origen judío, superviviente del Holocausto, Milan Platovsky Stein (1922-2012), fue socio de Mellafe y Salas, empresa dedicaba a armar radiotransistores, tocadiscos, televisores y electrodomésticos, que representó en Chile a marcas como Panasonic, que después dirigió su padre, Daniel Platovsky Turek, y que dejó de operar a mediados de la década pasada. Su madre, Ana Mingo Marinetti, es tecnóloga en alimentos y hoy es gerente de hospitalidad en el Hotel Termas de Chillán.
Sin embargo, nunca laboró en empresas de la familia. Tras su paso por Lounge, en 2007 entró a Falabella como brand manager de Diadora y después ascendió a product manager del departamento de deportes.
Sus siguientes escalones fueron la gerencia de Stand Alone; la gerencia Falabella Zona Oriente de Santiago, la gerencia comercial de Falabella Retail y en 2017 asumió como gerente comercial corporativo de Falabella Retail. Cuando ha estado a cargo de las tiendas, suele visitarlas los fines de semana. También representa desde hace cuatro años a Falabella en la Cámara de Comercio Chileno Colombiana.
Quienes interactúan con él comentan que es extrovertido y directo, lo que genera confianza. “Es muy resiliente, atributo que heredó de su abuelo, a quien admira mucho y cuya experiencia de vida lo marcó”, comenta un amigo. Y agregan que es muy comprometido con el trabajo.
Legend de Old Boys
En 1984 entró a The Grange School y si bien empezó a jugar rugby en tercero básico en las horas de deportes, no fue hasta 1997 que se puso la camiseta de Old Boys, donde tuvo una notable trayectoria hasta 2007. Según sus pares, era reconocido por ser “disciplinado, leal y de mucha entrega”; solo tuvo una expulsión durante su década en las canchas. Participó en tres finales y con ese equipo fue campeón en 2005; aunque él dice no tener mérito en esta copa, porque se lesionó en la semifinal, lo consideran un “puntal en la historia del club”. También fue seleccionado nacional.
Sus excompañeros testimonian su liderazgo, compromiso, garra y sus memorables tackles. También que le tenían poca fe porque pesaba unos 45 kilos. En una larga entrevista en la serie Legends del programa de Old Grangonian Club en YouTube, sus compañeros de colegio y de camiseta recordaron entre risas que lo apodaban Elmer, el gruñón, por su mal genio de entonces y coincidieron en destacar su perseverancia para sacar musculatura. A punta de ejercicios, pesas y batidos subió 25 kilos para llegar a ser “uno de los mejores centros en la historia del club”.
Sus hermanos tuvieron que asistir a sus innumerables partidos. Su polola desde los 17 años y luego esposa, la abogada tributarista Astrid Hardessen, lo acompañó durante esa década de intensa dedicación al club, en que se levantaba a las 5 de la mañana para entrenar. Tienen tres hijos: Martín (13), Laura (10) y Elena (6).
Desde que dejó la cancha mantiene una rutina diaria de ejercicios y se ha dedicado a practicar el ciclismo además del esquí, que une a toda la familia. Pero en su vida diaria sigue apareciendo el rugby, como en la forma de abordar el trabajo en equipo, donde suele usar como metáforas jugadas del rugby para explicar cómo abordar las tareas, priorizar y asumir con determinación los desafíos.
Disfruta de la vida en familia y hacer panoramas con los amigos, muchos de ellos, excompañeros de colegio. Sibarita y gran conocedor de restaurantes en Chile y el extranjero, un familiar lo califica como “megacocinero”. Los fines de semana prepara asados, risotto, comida asiática y peruana; hace pan, pizzas y le gusta ir a comprar los ingredientes. Esta afición la heredó de su madre, descendiente de italianos, ya que pastas y postres se preparaban en casa.
Los otros Platovsky Mingo
Tomás es el mayor de cinco hermanos. Le sigue Caterina, quien hizo un máster en política educacional en la Universidad de Harvard y se desempeñó en el Ministerio de Educación en los dos gobiernos de Sebastián Piñera. Entremedio fue directora de Estudios de Pedagogía Básica de la Universidad de los Andes. Hoy vive en Bogotá.
Matías es guía turístico y emprendedor. Vive en Rapa Nui con sus tres hijos y su esposa pascuense. Nicolás es actor, ha trabajado en la compañía de La Chimba y está radicado en Londres.
Daniel, el menor de la familia, hizo la práctica en Mellafe & Salas; luego trabajó en el Banco Santander y ahora es gerente general de Plusmedical, empresa dedicada a la venta de equipos médicos, donde los hermanos poseen en conjunto el 33% y el resto está en manos de otros cuatro socios.