Security y Antarchile se pelean el último cupo del nuevo Ipsa
A un par de días del cierre estadístico del nuevo Ipsa, que llevará a que el 21 de septiembre se realice un primer rebalanceo tras la toma control por parte del S&P Dow Jones Indices, Banchile Inversiones actualizó la simulación de la composición del índice, el que pasará de las actuales 40 acciones, a un máximo de 30.
Así, indicó que "con alta convicción" las acciones que saldrán del selectivo serán IAM, Forus, Embonor-B, Besalco, Oro Blanco, La Polar, SAAM, Masisa y SK. Además, indicaron que en base a sus cálculos, se descartaría la entrada de SMU al índice S&P/CLXIPSA, y deja en suspenso quien será el último en ingresar al selectivo.
De este modo, estiman que Grupo Security tiene la mejor opción para asegurar el último cupo, amenazando la permanencia de Antarchile. Además, Banchile identificó "cambios significativos" en los pesos de algunas acciones como resultado de la revisión del Free Float a estándares internacionales que hará S&P Dow Jones Indices.
Como ejemplo de esto último, el gran damnificado sería Copec, que pasaría de tener una ponderación de 10,1% en el índice a 8,1%, siendo relegado por Falabella al segundo lugar. Esto, además, implica que los fondos pasivos que siguen al Ipsa -considerando esta nueva ponderación- tendrían que vender US$ 9,2 millones de la acción ligada a la familia Angelini.
En la vereda contraria está SQM, que subiría su ponderación en el principal índice bursátil del país a 7,4%, ocupando la tercera posición. Además, esto se traduce en que los fondos, una vez que se haga el rebalanceo, tendrán que hacer compras por US$11,9 millones, lo que equivale a un día completo de transacciones de la minera no metálica
AFP seguirían comprando acciones de Mallplaza
Dos semanas lleva en el mercado Mallplaza, y los montos transados han sido la tónica de un papel que por su precio no ha brillado.
Descontando el monto de la subasta de acciones que originó su apertura, los montos transados acumulaban hasta ayer más de US$180 millones.
El gran flujo se debe a que durante días, tras su apertura, su cotización estuvo por debajo de la colocación de la IPO ($1.431), lo que llevó a que algunos inversionistas que no participaron de la operación entraran en el papel. En el mercado dicen que en este período las AFP han desembolsado cerca de US$100 millones, siendo que en la apertura su participación fue inferior a los US$ 50 millones.