Incertumbre. Esa es la sensación que ronda por estos días en la Dirección del Trabajo. Es que si bien la salida de Mauricio Peñaloza de la cabeza del organismo logró apaciguar un poco los ánimos, la situación no se logró contener del todo. Esto, porque al parecer la molestia al interior del Ministerio del Trabajo sigue presente, por lo que en el organismo fiscalizador se espera que hayan más desvinculaciones de personas ligadas al proceso de la elaboración de estadísticas, ya que hay una opinión crítica de parte de la autoridad política de cómo se dieron a conocer los datos de despidos por necesidades de la empresas y la confusión que generó en la opinión pública el cambio de criterio.
En este contexto, la próxima semana será clave, ya que el subsecretario del Trabajo, Fernando Arab, retoma sus actividades luego de sus vacaciones. En ese punto, conocedores de la interna de la DT, anticipan que habrá decisiones oficiales sobre los procedimientos que deberá aplicar la entidad fiscalizadora. De hecho, el martes, el ministro (s) de Trabajo, Pedro Pizarro, afirmó que ya se están llevando a cabo una serie de modificaciones de orden procedimental para dejar atrás este tipo de situaciones.