La cifra del Índice de Precios al Consumidor de octubre sorprendió al alza al mercado. Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el IPC anotó una variación mensual de 1,0% llegando a un acumulado en el año de 4,5% y de 4,7% en 12 meses.
Este registro, que no estaba en el escenario de ningún analista, no sólo generó sorpresa, sino que también comenzó a tener consecuencias en las proyecciones que esperan los economistas tanto para la inflación de este año, como en la convergencia al 3%, que es la meta del Banco Central.
Un primer cambio es que ninguno de los economistas consultados espera que ahora, con este nuevo registro, se cumpla la última proyección de inflación que tiene previsto el Banco Central de 4,5% para fines de este año.
En la parte superior de las estimaciones se encuentra el director ejecutivo CIES-UDD, Víctor Martínez, quien proyecta un IPC acumulado anual de entre 4,8% y 4,9%. Mientras que Alejandro Fernández, economista de Gemines, prevé que la inflación cerrará el año en torno a 4,8% y tal vez hasta en 5%.
Le sigue de cerca la estimación Carolina Molinare, economista del OCEC-UDP, quien afirma que “el dato de octubre complejiza el escenario de 4,5% de inflación anual que tenía el Banco Central”. En su escenario base prevé un 4,8% y “proyectamos que la meta de 3% será alcanzada en 2026″.
“Al estar tan cerca de fin de año, cualquier dato distinto al esperado mueve la proyección a diciembre. En este caso, nos movimos marginalmente al alza hasta 4,7%”, señala Nathan Pincheira, economista jefe de Fynsa. Misma previsión que tiene Pavel Castillo, economista y gerente de intelligence en Corpa: “Con cierto grado de optimismo la inflación será de 4,7% para este año, considerando una inflación negativa en diciembre como el año pasado por promociones de Navidad”.
¿Mantener o bajar la TPM?
El 17 diciembre se vuelve a reunir el Banco Central para analizar la Tasa de Política Monetaria (TPM). Y entre los economistas no hay un consenso respecto a si va a continuar a la baja.
Mientras algunos sostienen que se mantiene la proyección de reducción en 25 puntos base en la próxima reunión, otros no creen que el Banco Central deba seguir su tendencia a la baja de la TPM, al menos en esta ocasión.
Entre quienes esperan que se mantenga una reducción de 25 puntos base está Pincheira, quien dice que “no estamos en un contexto de alta inflación. Estas alzas de precio están muy concentradas en tarifas eléctrica y elementos volátiles. Por lo tanto, es completamente consistente seguir bajando tasas”.
Este análisis es compartido por Felipe Alarcón, economista de EuroAmerica: “Si uno observa las variaciones del IPC subyacentes (sin volátiles y la SAE) esas variaciones fueron mucho más acotadas, lo que sugiere que no hay grandes presiones inflacionarias, por lo que creemos que el BC podría seguir bajando la tasa sin asumir grandes riesgos al menos en las próximas dos reuniones”, explica el economista.
Asimismo, Molinare también concuerda con que hay espacio para seguir recortando la tasa de interés. “Esperamos una reducción de 25 puntos base, dado que la actividad económica continúa débil”.
En la otra vereda aparece la postura de Fernández: “Si no hay novedades positivas en los menos de 40 días que faltan para la próxima reunión, lo razonable sería hacer una pausa en la tendencia a la baja de la TPM”, sostiene.
Esta opinión es refrendada por Natalia Aránguiz, socia y gerente de Estudios en Aurea Group, quien afirma que “la TPM no debió rebajarse en octubre y para diciembre tenemos la misma opinión. Consideramos que los datos macroeconómicos no entregan margen para una nueva rebaja”.
Y Felipe Jaque, economista jefe de grupo Security, complementa que “en este contexto el Banco Central esperaría un par de meses antes de continuar con los recortes de la TPM. Más aún con la expectativa respecto a que la Reserva Federal también podría ir más lento”.
Qué pasó en el mes
Las divisiones que más aportaron en esta alza fue Vivienda y Servicios Básicos, donde está incluido el ítem de cuentas de la luz. Según el INE, esta división tuvo un alza de 3,1% y una incidencia mensual de 0,544 puntos, es decir, explica la mitad del IPC del mes. Si se analiza sólo el producto suministro de electricidad, en octubre presentó un aumento mensual de 18,9%, aportando 0,483pp a la variación del indicador general. Acumuló un aumento de 45,7% al décimo mes del año.
Pero para los economistas lo que más sorprendió fue el comportamiento que tuvieron los precios de los alimentos. Según se detalló, en octubre subieron 2,2% y registraron una incidencia de 0,495 puntos.
“Se esperaba que los aumentos en las tarifas eléctricas, las cuales ya se han conversado y la mayoría conoce, influyeran en el alza del IPC y efectivamente fue uno de los protagonistas de este aumento, sin embargo, hubo un aumento en alimentos mucho más alto de lo que se esperaba”, asegura Martínez.
Misma visión entrega Molinare, quien subraya que “las alzas en el ítem de alimentos tuvieron la variación mensual más alta del año, destacando alimentos como la carne de vacuno, que al ser un alimento altamente importado se ve afectado por el alza que ha tenido el tipo de cambio”.
Alarcón explica que en su caso “las sorpresas al alza, en orden de importancia, se dieron en alimentos, gasto común y en la menor incidencia negativa producto del CyberDay que ocurrió durante octubre”. Una opinión divergente entrega Patricio Ramírez, coordinador del Observatorio Económico Social de la UFRO, quien señaló que “se están viendo los denominados “efectos de seguridad da vuelta” del alza de tarifas eléctricas que están impactando en el costo de productos como alimentos, gastos comunes, transporte”.