A mediados de 2019 se comenzó a implementar un sistema de trazabilidad para las cajetillas de cigarrillos que se comercializan en el país. Por esta medida, todas ellas tuvieron que incluir un sistema de marcación que permite distinguir productos falsificados de los originales y monitorear el correcto pago de los impuestos que se aplican al sector.

Con este mecanismo en marcha, el Servicio de Impuestos Internos (SII) ha podido realizar controles automáticos a productores e importadores, verificando el correcto pago del Impuesto Específico a los cigarrillos y también de otros impuestos, como IVA y renta.

Las primeras estimaciones que hizo el gobierno antes de que se iniciará este proceso era que se iba a recaudar unos US$ 314 millones anuales adicionales. Los resultados superaron esas expectativas. En 2020, se logró recaudar US$ 1.259 millones lo que se traduce un alza de 5% en comparación a 2019 cuando todavía no se aplicaba este nuevo sistema.

Ese saldo positivo siguió en 2021. pese a las limitaciones en la fiscalización que generó la pandemia. De acuerdo a un análisis que realizó SICPA, proveedora del sistema de trazabilidad para el tabaco, en base a cifras de la Dirección de Presupuestos, la recaudación del Impuesto Específico a los Cigarrillos subió 21,4% en el primer semestre de 2021 en comparación al mismo período de 2020 totalizando US$ 767 millones. Así, de acuerdo a cálculos de SICPA, de mantenerse la tendencia de la recaudación en lo que resta del año, se proyecta un incremento anual nominal de 21,3%.

Jorge Trujillo Puentes, director de Desarrollo de Negocios para Latinoamérica de SICPA, sostiene que “de haber seguido la tendencia observada en los últimos años, la recaudación del primer semestre de 2021 debió caer un 3,4% respecto al primer semestre del año anterior, en vez de crecer un 21,4% Esa diferencia se traduce en una mayor recaudación equivalente a US$196 millones, atribuible al sistema de trazabilidad”.

Otro análisis que hace Trujillo es que a la mayor recaudación registrada por la implementación de la trazabilidad se debe agregar otros US$55 millones por concepto de menor evasión de IVA. Además, menciona que esta menor evasión se traduce en una mayor utilidad gravada con el Impuesto de Primera Categoría. Por ello, dice que asumiendo un margen de ganancia del vendedor del 30% sobre ingresos, habría una mayor recaudación de US$23 millones por ese concepto. “En total, se estima que al primer semestre de 2021 hubo una mayor recaudación de US$274 millones por menor evasión en la venta de cigarrillos, cifra equivalente a 92 veces el costo del sistema, que es de US$3 millones semestrales”, puntualiza Trujillo.

cigarro

¿Qué es el sistema de trazabilidad?

La trazabilidad consiste en la marcación de cada cajetilla directamente en la línea de producción, en el caso de los productores nacionales, y mediante una estampilla, en el caso de las importaciones. Ambos tipos de marcación se basan en un código de seguridad especial que es distinguible mediante el uso de dispositivos tecnológicos específicos con los que cuenta el Servicio Nacional de Aduanas y el Servicio de Impuestos Internos para sus labores de fiscalización.

La información que se genera por ambas vías -la producción nacional e importación- se envía en línea al SII, de manera encriptado y en formato electrónico, para el cruce de datos y el análisis de información respectivo, el que permite focalizar la ejecución de las acciones de cumplimiento tributario. Adicionalmente, la producción nacional destinada a la exportación también se encuentra registrada, para fines de control.

De acuerdo a la legislación vigente los paquetes, cajas o envoltorios de cigarrillos pagan un impuesto específico equivalente a 0,0010304240 unidades tributarias mensuales por cada cigarrillo que contengan, además de un impuesto de 30%, que se aplica sobre el precio de venta al consumidor, incluido impuestos, por cada paquete, caja o envoltorio.