Si el mecanismo que propone el gobierno para que las AFP compensen a los afiliados frente a pérdidas en multifondos hubiese funcionado en los últimos quince años, las administradoras habrían tenido que activar la fórmula de compensación en tres años.
Lo anterior, considerando que el gobierno propuso que las AFP tengan que devolver a las cuentas individuales de sus cotizantes un porcentaje de las comisiones cobradas, cuando los fondos hayan tenido una rentabilidad real negativa durante un año calendario.
Eso sí, se excluirá de esta obligación al fondo A, que es el multifondo más riesgoso y donde sólo pueden haber afiliados que hayan escogido estar ahí.
En concreto, en los últimos quince años las AFP han registrado pérdidas en algunos de sus multifondos -sin considerar el A- sólo en tres ocasiones.
La primera y más grande de ellas fue en 2008, cuando ocurrió la crisis subprime. Al cierre de ese año el multifondo B perdió 30,08%, el fondo C retrocedió 18,94%, el D bajó 9,86%, y el E disminuyó 0,93%.
El segundo año en que las AFP registraron pérdidas en los fondos de pensiones fue en 2011, año en que el fondo B perdió 7,52%, y el C retrocedió 3,79%.
Por último, en 2018 también registraron pérdidas el multifondo B y C, disminuyendo 3,7% y 0,89%, respectivamente.
Con todo, la propuesta del gobierno considera que la devolución de comisiones en caso de rentabilidad negativa se hará a la cuenta individual, en proporción al periodo de permanencia de los recursos previsionales en los fondos que experimentaron dicha rentabilidad negativa.
Si el cotizante tiene sus recursos en dos tipos de fondos, se devolverá en proporción al saldo promedio mantenido en el o los fondos con rentabilidad real negativa.