La Unión Europea (UE) preparaba el lunes sanciones contra el petróleo ruso, con posibles exenciones para los países más cautelosos, y advirtió que cumplir en su totalidad con el plan propuesto por Moscú de recibir los pagos del gas en rublos infringiría las sanciones existentes de la UE.
Se espera que la Comisión Europea proponga esta semana un sexto paquete de sanciones de la UE contra Rusia por su invasión de Ucrania, incluido un posible embargo a la compra de petróleo ruso, una medida que privaría a Moscú de una gran fuente de ingresos, pero que hasta ahora ha dividido a los países de la UE.
La resistencia de algunos países a un embargo de petróleo parece estar disminuyendo previo a una reunión el miércoles en la que los embajadores de los países de la UE discutirán las sanciones propuestas.
“Hemos conseguido llegar a una situación en la que Alemania es capaz de soportar un embargo de petróleo”, dijo el lunes el ministro alemán de Economía, Robert Habeck. “Esto significa que no será sin consecuencias”.
La ministra austriaca de Clima y Energía, Leonore Gewessler, dijo que Viena estaría de acuerdo con las sanciones petroleras si otros países lo hicieran.
Los países de la UE han pagado más de 47.000 millones de euros (US$ 47.430 millones) a Rusia por gas y petróleo desde que invadió Ucrania el 24 de febrero, según la organización de investigación Centre for Research on Energy and Clean Air.
En una reunión de los ministros de Energía de la UE celebrada el lunes, el bloque trató de aclarar su postura sobre la exigencia de Rusia de que los países paguen efectivamente el gas en rublos o se enfrenten a la pérdida del suministro.
La semana pasada, Rusia cortó el suministro de gas a Bulgaria y Polonia por negarse a cumplir su plan de pagos, lo que hace temer que otros países puedan ser los siguientes.
La Comisión dijo el lunes que cumplir con el plan propuesto por Rusia en su totalidad violaría las sanciones existentes de la UE contra Rusia por su invasión de Ucrania, pero prometió una orientación más detallada sobre lo que las empresas pueden y no pueden hacer legalmente.
“Pagar rublos a través del mecanismo de conversión gestionado por las autoridades públicas rusas y una segunda cuenta dedicada en Gazprombank es una violación de las sanciones y no puede aceptarse”, dijo el comisario de Energía de la UE, Kadri Simson, en una conferencia de prensa tras la reunión de los ministros.
Moscú ha dicho que los compradores extranjeros de gas deben depositar euros o dólares en una cuenta del banco privado ruso Gazprombank, que los convertiría en rublos.
El decreto ruso dice que la obligación del comprador se considerará completa sólo después de que la moneda extranjera se convierta en rublos.
Las capitales europeas se han dividido en cuanto a la conveniencia de utilizar el mecanismo, mientras la UE se esfuerza por dar una respuesta unificada.