El mayor dinamismo del sector de la construcción se vio reflejado en los balances del 2018 de las principales firmas de esta industria.
Según estos números, los ingresos agregados de las siete empresas del rubro que reportan sus balances a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), Salfacorp, Socovesa, Paz, Besalco, Ingevec, Moller y Pérez-Cotapos y Echeverría Izquierdo, sumaron US$3.323 millones en 2018, 4,7% más que si se compara con el mismo período de 2017. Se trata del mayor alza y monto de ventas registrado desde 2012 para el cierre de un año.
Desde el sector apuntan a que la mayor actividad económica y de mejores expectativas del consumidor, está impulsando las ventas del rubro. En esa línea, el conjunto de compañías registró utilidades del orden de los $127.777 millones en 2018, cifra 16% superior a la que anotaron el año anterior. En términos de monto, es la mayor cifra alcanzada en seis años.
Dentro del grupo, solo Paz y Socovesa disminuyeron sus ingresos, en un 18% y 17%, respectivamente. Moller y Pérez-Cotapos fue la compañía que registró el mayor aumento en las ventas el año pasado. La empresa elevó sus ingresos en 94% y obtuvo las mayores utilidades de su historia, como consecuencia de un mayor nivel de escrituración de proyectos inmobiliarios y del desarrollo de obras hospitalarias. El resto de las firmas anotaron variaciones anuales entre 7% y 8% en las ventas.
Aunque en general las empresas vislumbran un buen 2019, principalmente en términos de desarrollo inmobiliario, la cartera de contratos de obras a ejecutar por empresas para los próximos años, indicador conocido como backlog, bajó 1,7%. Este sumó US$4.442 millones al cierre de diciembre de 2018 en términos agregados.
Salfacorp, la mayor constructora del país, reportó un backlog total por $948.640 millones, inferior en 7% a diciembre de 2017. De ese total, $697.000 millones son ejecutables en 2019.
Besalco fue la segunda compañía que reportó una caída en su backlog que alcanzó los US$1.099 millones, 11,9% inferior al de diciembre de 2017. La compañía explicó que la cifra responde en gran medida a nuevos contratos de servicios de maquinarias, la adjudicación de contratos de construcción para la minería tanto en Chile como en Perú, y en el área de energía la reciente adjudicación de contratos de transmisión eléctrica. Eso sí, hace hincapié en que "vemos un crecimiento en las inversiones mineras, lo que se ve reflejado en un aumento de los llamados a licitación para obras civiles en esta área, lo que nos hace prever un aumento de la carga de trabajo en el futuro".
Ambas compañías, eso sí, fueron las que reportaron el mayor monto en proyectos por ejecutar.