Un golpeado primer semestre tuvo Empresas Tricot, atribuible a la crisis que vive el país por el Covid-19. En concreto, la compañía disminuyó sus ventas en 46,8% en comparación al primer semestre del año pasado, lo que se debió por una baja de las ventas de mercadería (negocio retail) en un 58,4% y el negocio financiero en un 18,4%. La cifra pasó de $48.319 millones a $25.683 millones.
En lo que respecta a operaciones, para Empresas Tricot, con 98 puntos de ventas desde Arica a Punta Arenas los efectos han sido significativos: sus tiendas, por efectos de cuarentenas que afectaron en distintos tiempos y plazos en las diversas ciudades, sólo estuvieron abiertas un total de 5,227 días-tienda comparado con 8,392 días-tienda del año 2019. En concreto, la cadena sólo pudo operar con un 62% de su capacidad instalada, sin tomar en cuenta las diferentes capacidades de ventas de tiendas grandes vs medianas o pequeñas. Su Centro de Distribución sólo pudo operar 45 días del trimestre, es decir un 50% del tiempo. Esto implica que el reabastecimiento se ha realizado inter-tiendas lo que complejiza la operación.
En los dos segmentos de negocios en que se opera lo anterior redundó en una disminución de ventas retail en el 2T20 de un 60% respecto a igual período de año anterior. Por su parte, el negocio financiero disminuyó sus colocaciones en un 61%, debido a la política de la empresa de velar por la calidad y liquidez de sus activos ante el aumento del nivel de riesgo de las colocaciones.
En tanto, El EBITDA del segundo trimestre fue negativo de $306 millones (1,2% de los ingresos), lo que representa una disminución del 103,5% con respecto al mismo periodo del año anterior ($8.647 millones).