El comercio logró sortear los efectos de la crisis económica provocada por el Covid 19 luego de caer 20,8% en el segundo trimestre, el sector tuvo una variación nula en el tercero. Esto, como consecuencia de la flexibilización de los confinamientos, las medidas económicas de apoyo a los hogares y el retiro de una parte de los fondos previsionales. Y los economistas ya han adelantado que este sector será clave para sostener el Producto Interno Bruto (PIB) del cuarto trimestre, la que se espera sea positiva.

Y por el momento, el termómetro semanal de las ventas minoristas realizado por la Cámara Nacional de Comercio (CNC) refleja esa tendencia.

De acuerdo con el reporte, los resultados de la semana del 2 al 8 de noviembre registran un alza de las ventas minoristas de 135,6% anual. Al excluir supermercados se evidencia un crecimiento de 224,1% respecto a igual semana de 2019.

Detrás de estas fuertes alzas, el reporte menciona que un factor de base de comparación, debido a los efectos del estallido social 2019.

Ahora bien, al comparar con la semana previa, el incremento es de 53,9% y al excluir supermercados se registra un alza semanal de 100,9%. En esta alza se evidencian mejores resultados debido al cyberweek que aceleró fuertemente las ventas. Al separar por tipo de establecimiento, se produce una diferencia, donde las tiendas especializadas se desaceleran y marcan un alza de 52,1%, mientras que las no especializadas (excluyendo supermercados) crecen un 330%. Por su parte, supermercados crece un 37,6% anual entre el 2 y 8 de noviembre.

Bernardita Silva, gerente de Estudios de la CNC, explica que probablemente la semana 46 habrá un crecimiento menor en 12 meses, ya que no estará el efecto del cyberweek. “Hay muchos efectos puntuales que están afectando la medición”, afirma. Por eso, si bien comparte el análisis que hacen los economistas de que este sector apuntalará la economía en la última parte del año, pone una nota de cautela, puesto que “hay un factor de base de comparación que ayudará”.

Recuerda que “en el último trimestre del año pasado el comercio cayó 4,8%, por lo que esa menor base ayudará, a lo que se podría sumar el efecto del mayor consumo que podría significar el segundo retiro (del 10% de los fondos previsionales)”.

Con respecto al efecto que pueda tener la campaña que llama a adelantar las compras de Navidad, Silva acota que “ayudan a tener mayores niveles de consumo”.

Para este año, Silva proyecta que el PIB del comercio caerá entre -5,2% y -6,2%, pero ahora menciona que “podría tener un sesgo más hacia arriba y la caída podría acercarse al -5,2%”.

El termómetro semanal de ventas del comercio minoristas busca ir midiendo durante esta crisis sanitaria-económica (Covid-19) la situación que enfrenta el sector (presencial y online) a nivel país, representado por tiendas especializadas, tiendas no especializadas, grandes comercios y supermercados.

El indicador mide la variación nominal en las ventas semanales respecto a igual semana de 2019 y la variación nominal en las ventas semanales respecto a la semana que la precede.