El peso argentino cayó por tercer día mientras el gobierno inicia reuniones con el Fondo Monetario Internacional para discutir sobre una posible línea de crédito de hasta US$30.000 millones para fortalecer la economía del país y frenar la caída de la moneda.

Al cierre de las cotizaciones, el peso trasandino cayó 0,94% a 22,69 por dólar, extendiendo la depreciación de la moneda al 18% este año. Los mercados de bonos no registraban una tendencia definida, con el rendimiento del bono del siglo rebotando tras alcanzar un máximo récord el martes. El rendimiento del bono de referencia al 2027 registraba pocos cambios.

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El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y los funcionarios del banco central tienen previsto reunirse con la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, en Washington el miércoles. Argentina estaría solicitando al FMI US$30.000 millones para calmar los mercados que han sido afectados por preocupaciones de que la consolidación fiscal no está materializándose y que el país sigue estando expuesto a golpes externos como mayores tasas de interés en Estados Unidos.

"Se han iniciado discusiones sobre cómo podemos trabajar juntos para fortalecer la economía argentina y eso se intentará en breve", dijo Lagarde en un comunicado el martes por la noche.

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La caída del peso a un nivel récord el lunes se extendió a los mercados de deuda y de acciones, lo que derivó en la postergación de salidas a bolsas y ventas de bonos corporativos. Legisladores de oposición amenazan con demorar la aprobación de cualquier acuerdo con el FMI, al que muchos culpan por la crisis de 2001 que provocó el mayor incumplimiento de deuda soberana del mundo en 2001.

Si el Fondo niega cualquier tipo de ayuda a Argentina, las condiciones del mercado probablemente se deteriorarían aún más y la prima de riesgo de los activos locales vería una suba adicional, de acuerdo con estrategas de Morgan Stanley encabezados por James Lord.

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La vara parece estar relativamente alta para que el país califique para la llamada línea de crédito flexible del FMI y es más probable que se le otorgue al país una línea de precaución y liquidez, una línea de crédito con menores exigencias, dijeron los estrategas en una nota a clientes.

"Si este es el caso y la cantidad otorgada asciende a más de lo que permite la cuota actual, esperaríamos una reacción algo positiva del mercado, pero una condicionada a los términos vinculados a la aprobación de la línea de crédito y al monto final de ella", escribieron los estrategas.

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