Dos funcionarios senior de la Reserva Federal buscaron terminar con las percepciones de que el banco central está avanzando rápidamente para moverse a favor de la economía y le hicieron un guiño a los inversionistas por estar "fuera de sincronización" con el pensamiento de la Fed.
Es el intento más claro de las autoridades por aclarar la política monetaria de la Fed luego que Ben Bernanke, presidente de la Fed, agitara los mercados con un calendario para recortar las compras de bonos por US$85.000 millones mensuales, este año.
Bill Dudley, presidente de la Reserva Federal de Nueva York, reiteró el camino delineado por Bernanke, que incluyó terminar con las compras de activos a mediados de 2014, pero dijo que "algunos puntos" debían ser enfatizados. El primero era que la política era solo "un posible resultado" y que dependía del "pronóstico y no del calendario", lo que significa que la economía tendría que mejorar en línea con las previsiones de la Fed.
"Si las condiciones de los mercados laborales y el impulso del crecimiento económico fueran menos favorables que en las proyecciones de la Fed... esperaría que las compras de activos siguieran a un ritmo más alto por más tiempo", contó Dudley. Agregó que "es muy probable que falte harto para un alza en las tasas de interés de corto plazo" y que tomaría mucho tiempo para que desempleo caiga bajo 6,5%, el margen para las primeras alzas de tasas, y que incluso entonces la Fed se tomaría mucho tiempo. Por su parte, el gobernador de la Fed, Jerome Powell, respaldó a Dudley y dijo que los mercados sobrerreaccionaron.